POSADAS. Este martes, la docente Lidia Cura contó su experiencia tras tomar contacto y asistir con alimentos a la aldea Urundaity, una comunidad mbya de unas 25 familias que se encuentra a unos 2 kilómetros y medio de Profundidad.

“Soy maestra en Profundidad y fui a visitarlos a ellos. Vi la realidad. Están abandonados y con hambre. Decidí llevarle por mis propios medios, algo de alimentos. Y después se me hizo insostenible. Así que pedí yuda a tanta gente solidaria que hay acá”, contó la docente, en diálogo con MisionesCuatro.

Según Lidia, estos mbya de Urundaity “acceden al salario universal y a algunas cosas que el municipio les acerca”.

Consultada sobre el trabajo de la Dirección de Asuntos Guaraníes, Lidia comentó: “Nunca los ví, pero sé que van a asistirles. Es difícil porque tienen sus costumbres y su forma de manejarse. El cacique siempre pide que se respeten sus costumbres. Pero hay un trabajo muy fuerte por hacer allí”, aseguró la maestra.

“Les estoy llevando la merienda todos los días, y algunas veces, el almuerzo, según lo que la gente me da. Cuando me dan carne, les cocino”, reveló Cura.