POSADAS. A un año del asesinato de Lilian Mariana y María del Carmen Villalba, las niñas formoseñas ejecutadas por el gobierno del Paraguay en el marco de un operativo militar contra el Ejercito del Pueblo Paraguayo (EPP) en la zona de Pedro Juan Caballero, a unos 360 kilómetros de Asunción, el reclamo de justicia por estos infanticidios, y la exigencia de la aparición con vida de Carmen “Lichi” Elizabeth –prima de las víctimas, secuestrada y desaparecida en Paraguayo– se hicieron sentir en Posadas y en todo el país.

Este jueves por la mañana, un grupo de manifestantes hicieron un reclamo público frente a la gobernación de Misiones y por la tarde, habrá marchas y actos frente a los consulados paraguayos de todo el país, con el reclamo para que el Estado paraguayo autorice, entre otros puntos, el ingreso de forenses de la Corte Suprema de Justicia Argentina y del EAAF (Equipo Argentino de Antropología Forense) para exhumar los cuerpos y realizar una autopsia completa.

En diálogo con MisionesCuatro, Cecilia Rodríguez, del Equipo Misionero de DDHH, Justicia y Género, ratificó que en Paraguay ni siquiera hay una investigación judicial por el asesinato de las dos niñas formoseñas que se criaron en Misiones y estaban visitando a familiares suyos del EPP, cuando militares de las Fuerzas de Tareas Conjuntas atacaron al campamento, apresaron a las niñas y las ejecutaron. Además, reveló que la familia de las víctimas, tuvo que dejar su residencia en Puerto Rico, por hostigamientos perpetrados por el Estado paraguayo en suelo misionero.

Niñas secuestradas y ejecutadas, en un caso que no se investiga en Paraguay

En diálogo con MisionesCuatro, Cecilia Rodríguez, del Equipo Misionero de DDHH, Justicia y Género, ratificó que en Paraguay ni siquiera hay una investigación judicial por el asesinato de las dos niñas formoseñas que se criaron en Misiones y estaban visitando a familiares suyos del EPP, cuando militares de las Fuerzas de Tareas Conjuntas atacaron al campamento, apresaron a las niñas y las ejecutaron. Además, reveló que la familia de las víctimas, tuvo que dejar su residencia en Puerto Rico, por hostigamientos perpetrados por el Estado paraguayo en suelo misionero.

“Estas niñas que nacieron en Formosa y se criaron en Misiones, fueron ejecutadas por fuerzas militares en el norte del Paraguay. Visitaban a familiares que eran integrantes de la guerrilla (EPP). A partir de ahí, el gobierno paraguayo calificó de exitoso el operativo y atribuyeron que eran mujeres adultas”, contó Rodríguez, en contacto con MisionesCuatro.

“En adelante –prosiguió– no dejaron de suceder hechos gravísimos. El grupo en el que ellas se encontraban fue perseguido en el monte. Desapareció una de sus primas Carmen Elizabeth Oviedo, que tenía 14 años en ese momento. Y fue una de las testigos de cómo esas niñas, fueron capturadas con vida, por militares, que luego las ejecutaron”, sostuvo la referente del Emidh.

Asimismo, Rodríguez puso de relieve que “capturaron a Laura Villalba, madre de las niñas ejecutadas y otra de las testigos clave”.

La familia tuvo que huir de Misiones, por falta de garantías

Consultada al respecto, Rodríguez confirmó que el Estado argentino, no pudo garantizar la seguridad de la familia de las víctimas, que residían en Puerto Rico y tuvieron que mudarse de Misiones, por los hostigamientos sufridos. “Hubo situaciones de acoso. Por ser familiares de la guerrills estaban siendo acosadas en Paraguay y por eso vivián acá. Se fueron a vivir en Misiones para poder criar a sus hijas tranquilas. Pero después de los asesinatos, empezaron a decir que había personas que ingresaban a sus chacras. Que pasaban drones por arriba de la casa”, detalló.

“Cancillería pidió explicaciones por los drones y por la presencia permanente de personas allí. Vivían a metros del río (Paraná). Estas situaciones generaron una gran inseguridad y decidieron irse”, confirmó Rodríguez. Con esto quedó en evidencia que ni el gobierno nacional ni el provincial, pudieron garantizar la seguridad de esta familia. Hostigada en suelo argentino.

Acciones de la ONU y de Human Rights Watch

Según esta referente del Emid, “el gobierno argentino intervino a través de Cancillería, pidió participar en la causa judicial que hubiera. Pero no hay causa judicial ni investigación. Hasta ahora el Estado Paraguayo le negó al Argentino esta posibilidad. (Cancillería) también pidió que ingrese el EAAF para hacer una autopsia. Hay una impunidad total y una negativa del Estado paraguayo a cualquier tipo de acción para esclarecer lo que pasó allí”, denunció Rodríguez, quien está conforme con lo actuado por el gobierno argentino a la fecha.

Por otra parte, Rodríguez resaltó que hay informes de la ONU y de la ONG Human Rights Watch, que son contundentes contra el Estado paraguayo. Y que las denuncias presentadas por la familia ante la ONU posibilitaron que en diciembre, puedan “declarar dos primas (de las víctimas) que volvieron de Paraguay. Denuncian que hubo un secuestro con vida de estas niñas. Y brindaron la versión no oficial de lo que pasó con estas niñas y con Lichita (Carmen Oviedo)”, precisó.

Ante la consulta de este medio, Rodríguez insistió en que Cancillería “convocó y presentó todas las acciones realizadas” por el infanticidio a la familia de las víctimas, que actualmente residen en Buenos Aires, por temor a la persecución desatada por el Estado paraguayo en suelo misionero.