Sigue estancada la causa por la muerte de Marco Oviedo

[CORPUS. Este domingo se cumplieron cinco meses del fallecimiento de Marco Oviedo (15), el chico que fuera picado por una araña de los rincones (Loxosceles laeta) y fue mal diagnosticado por dos médicos que trabajan en el Hospital de Nivel 1 de Corpus.

En diálogo con www.misionescuatro.com, Susana Bellomo, la madre del adolescente fallecido, se quejó por la paralización de la causa que lleva adelante el juzgado de instrucción nro. 7 de Posadas a cargo de José Alberto López, y no descartó llegar a medidas extremas como encadenarse frente a la gobernación en Posadas, para lograr el esclarecimiento del caso.

Como es de público conocimiento, Marco falleció por complicaciones de una picadura de una araña de la especie Loxosceles laeta, para la que se le debió suministrar el antídoto antes de transcurridas las 12 horas del ingreso del veneno en el torrente sanguíneo.

En esas horas, Marco hizo al menos dos consultas médicas en el hospital de Corpus y fue visto por dos médicos –el Dr. Cabrera y la titular del nosocomio, Teresita Vázquez- quienes no lo derivaron inmediatamente a un hospital de nivel 2 o 3, donde le aplicaran el antídoto.

En ese marco, tras la muerte del chico, la familia presentó una denuncia por mala praxis y hasta la fecha, según Bellomo, sólo se hizo un allanamiento en el hospital mencionado. De acuerdo con la mujer, ni ella ni nadie de su familia fue llamado a declarar para conocer los detalles de las últimas horas de vida de Marco.[/vc_column_text][vc_single_image image=”218247″ img_size=”full” alignment=”center”][vc_column_text]El juez a cargo de la causa tampoco habría convocado a los médicos intervinientes –denunciados por mala praxis- ni ordenó una autopsia para determinar fehacientemente la causa de muerte y, sobre todo, si pudo hacerse algo para evitar el desenlace. Para la familia de Marco, la causa está cajoneada para proteger a los médicos y autoridades provinciales.

Consultada sobre si algún funcionario se acercó a la familia, Bellomo fue terminante: “Nadie se acercó o comunicó con nosotros. Es como si no hubiera pasado nada. Hace poco los vi a los médicos (denunciados) porque llevé a una sobrina y no podían mirarme a la cara”, expresó la mujer, que no descartó llegar hasta Posadas y tomar medidas extremas para lograr visibilidad en el caso.

La muerte de Marco puso de manifiesto uno de los problemas más graves del sistema sanitario misionero: la enorme centralización de los recursos en el Hospital Madariaga. Pese a que las arañas de la especie Loxosceles laeta están presentes en toda la provincia, no hay antídotos disponibles en los hospitales de nivel 1. Es más, gran parte de los médicos desconocen la presencia de estas arañas y carecen de información sobre el cuadro de loxoscelismo que debe ser atendido con sumo cuidado, porque puede ser fatal en algunos casos.

Marco fue derivado al Madariaga a 36 horas de la picadura, cuando debió recibir el antídoto antes de la hora 12. El primer médico que lo vio le dio un analgésico. La titular del Hospital de Corpus lo derivó, pero ya era demasiado tarde. Así pues, la familia sigue exigiendo justicia.