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Una trampa gigante para advertir a la humanidad

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La Aripuca es un emprendimiento familiar agro turístico ubicado en la ciudad de Iguazú. Busca crear conciencia ecologista.

Una trampa gigante para advertir a la humanidad

[vc_row][vc_column][vc_column_text]La Aripuca es un emprendimiento familiar agro turístico ubicado en la ciudad de Iguazú. Busca crear conciencia ecologista.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_single_image image=”218910″ img_size=”full” alignment=”center”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]La Aripuca es una opción para los viajeros que llegan a Misiones o para los misioneros que van a vacacionar en la provincia.

Este monumento se encuentra en la ciudad de Iguazú y se trata de una reproducción gigante de una típica trampa para pájaros usada por los nativos guaraníes.

Mide 17 metros de altura y tiene 500.000 kilos de peso distribuído en troncos de 30 especies nativas de la Selva Misionera.

Fue construida para crear conciencia ecologista y evitar que la humanidad caiga en su propia trampa de destrucción.

Ecología

Los ejemplares centenarios están agrupados para mostrar “lo que estamos perdiendo” y como, desde el desinterés y falta de preocupación por el cuidado del medioambiente, “podemos ser víctimas de nuestra propia trampa”, destacan los propietarios de este atractivo turístico.

Al ingresar al monumento se podrá observar cada uno de los troncos, aprendiendo desde el contacto directo, un poco más sobre la Selva Misionera y sus principales protagonistas.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_single_image image=”218911″ img_size=”full” alignment=”center”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]

Inspiración

La trampa original, muy utilizada incluso hoy día por los pueblos guaraníes, está compuesta de pequeñas ramitas unidas en forma de pirámide conectadas a un mecanismo muy sencillo pero efectivo, donde al ingresar la presa a la trampa y pisar una de las ramitas del mecanismo, la misma se cierra atrapando al animal.

La característica más singular de esta trampa y medio de captura, es que la presa no sufre ningún tipo de daño al ser capturada, y lo más importante aún, permite al capturador liberarla si considera que la misma no es adecuada, por ejemplo si es muy chica, es una presa que está preñada o no es apta para su consumo.

Teniendo en cuenta esto, fue construida La Aripuca, tratando de explicar que la sociedad está caminando hacia la trampa, pero todavía hay una oportunidad para sobrevivir.

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