Los vecinos del barrio Vecinos Unidos, en Garupá, están hartos de hacer constantes solicitudes a la municipalidad para que se arreglen las calles y se encause el arroyo que atraviesa la zona. Denuncian que, a pesar de los reiterados reclamos, no recibieron respuestas, lo que genera un ambiente de creciente preocupación y desesperación.

“Es un problema que tenemos desde hace varios años, especialmente por el tema del arroyo, que sigue sin ser encausado”, comentó Lourdes, quien explicó que con las intensas lluvias la situación se torna aún más caótica y peligrosa. Además, los vecinos sostienen que el puente que conecta con otras zonas es otro de los puntos críticos, ya que su deterioro lo convierte en un paso riesgoso tanto para vehículos como para peatones. “El puente que tenemos es peligroso, hemos tenido accidentes, caen camiones y autos”, aseguran.

Desde hace años, los residentes del barrio han presentado diversas notas y reclamos a la municipalidad, pero sienten que sus voces han sido ignoradas. “Presentamos notas y nunca nos escuchan. El barrio está abandonado por la municipalidad”, expresaron con frustración.

María, una de las vecinas que lleva 13 años viviendo en el barrio, relató: “Hace como 13 años que vivo acá, pedimos que nos ayuden, pero no nos hacen caso”. La situación llegó a tal punto que muchos temen por su seguridad, tanto por el estado de las calles como por el riesgo que implica el arroyo sin encauzar.