
El Gobierno nacional intensifica los esfuerzos para reforzar la seguridad en la Triple Frontera con Paraguay y Brasil, enviando 300 agentes a la región y evaluando la posibilidad de sumar a las Fuerzas Armadas al operativo. La decisión forma parte de un plan más amplio para controlar las filtraciones en el límite territorial y hacer frente a las crecientes actividades del narcotráfico.
Según fuentes oficiales, el despliegue de fuerzas de seguridad comenzó con la instalación de un cerco en Aguas Blancas y un operativo en las provincias de Misiones, especialmente en las ciudades de Bernardo de Irigoyen y Puerto Iguazú. El objetivo es aumentar la presencia de Gendarmería, Prefectura, Policía Federal y Policía de Seguridad Aeroportuaria en el área, considerada estratégica para el narcotráfico y otras actividades criminales.
La Casa Rosada también reportó que el pasado domingo se produjo un enfrentamiento con una organización vinculada al narcotráfico en la región, lo que resultó en un suboficial herido. Este incidente resalta la urgencia de reforzar los controles fronterizos, según fuentes del Ejecutivo, que aseguran que “la frontera toca muchos intereses” y requiere una atención especial.
Además, en Balcarce 50, sede de la Casa Rosada, se está evaluando la inclusión de las Fuerzas Armadas en el operativo. La posibilidad de su participación se basa en los decretos emitidos en los últimos meses, como el decreto 1112/24, que autoriza a las Fuerzas Armadas a combatir amenazas no estatales, como el narcotráfico y las organizaciones terroristas. Este marco legal podría ampliar las capacidades de las fuerzas en la lucha contra el crimen organizado en las fronteras.
El Gobierno también busca estrechar la cooperación con las agencias de inteligencia y seguridad de Brasil y Paraguay, para prevenir filtraciones de bandas criminales que operan en la región. En paralelo, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció la construcción de un alambrado de 200 metros en Aguas Blancas, Salta, en la frontera norte con Bolivia, como parte de una serie de medidas para proteger la seguridad nacional.
Además, se trabaja en una reforma migratoria que modifique la Ley de Migraciones (25.871) para evitar la llegada y asentamiento de inmigrantes ilegales, un tema que también se vincula a la seguridad en las fronteras, informó el portal TN.