CORRIENTES. Otro escándalo en el marco de la pandemia, más puntualmente con las tan preciadas vacunas contra el coronavirus, en esta ocasión ocurrió en Esquina, una localidad correntina, donde se inició una investigación por robo de vacunas y su posterior venta en el mercado negro.
Tras los crecientes rumores sobre las irregularidades que escandalizaron a la localidad que cuenta con más de 40 mil habitantes, el Director del Hospital San Roque de la localidad en cuestión, el Dr. Leandro Ramírez, realizó la denuncia ante las autoridades provinciales después de conocer rumores de que se vendían por 8 mil pesos las dosis de Sputnik-V y por 9 mil pesos las de Sinopharm.
De esta manera fue finalmente el Ejecutivo correntino el que inició la demanda penal. El fiscal Javier Mosquera ordenó el sábado 8 de mayo una serie de allanamientos y dispuso la detención de un enfermero, Guillermo Barrios y la responsable del suministro de vacunas, Sara Gutiérrez. Ambos son reconocidos trabajadores del centro de salud municipal.
Por su parte, el Ministerio de Salud de Corrientes emitió un comunicado en el que indican al tomar conocimiento del caso, la Asesoría Legal de la cartera dio aviso a la Fiscalía de esa ciudad, para que de forma inmediata se dé curso a la investigación correspondiente. La Justicia dictaminó el secreto de sumario y todavía no hay cifras precisas respecto a la cantidad de vacunas sustraídas de la dependencia oficial.
Según trascendió investigadores buscan avanzar de forma paralela en tres elementos que consideran fundamentales: determinar con exactitud cuántas vacunas fueron robadas, descubrir que sucedió con los ciudadanos que debían recibir esas dosis y averiguar todos los nombres de los compradores. Cabe señalar que uno de ellos, comerciante de la zona, también fue allanado por orden de la fiscalía.
