POSADAS. “Corto circuito no fue; al salir, bajamos la térmica porque se nos había quemado una tele, fuimos al lavadero y nos avisan que se estaba prendiendo fuego la casa”, reveló Fátima Amaro, una joven mamá que con su familia y la de sus primas, perdieron todas sus pertenencias a raíz de un incendio que ellos sospechan fue intencional.

En diálogo con MisionesCuatro, Amaro recalcó que el incendio se inició en una habitación que da a la vivienda de un vecino que los amenazó de muerte, justamente, a escasos días de radicar la denuncia policial por las amenazas.

De acuerdo con Amaro, el incendio de su vivienda en el barrio Prosol 1, se desató este sábado, por causas desconocidas, en inmediaciones de la vivienda de un vecino “con el que teníamos un drama. Presentamos una denuncia ante la Comisaría 9ª, por amenazas de muerte José Muelman hacia mi pareja y familia. Nos dio 48 horas para que nos fuéramos”, contó la joven, añadiendo que previamente a las amenazas proferidas el martes, hubo un hecho de agresión.

Según Amaro, “Pity” Muelman, hermano del vecino que los amenazó, “le pega con un fierro a mi marido”, y dice que no le importan las consecuencias, “porque tiene plata (y contactos)”. La joven reveló que su pareja tiene una arteria dañada, y el golpe con el hierro, fue en la misma zona de la lesión previa. “Lo manda a urgencias al hospital. El miércoles nos presentamos en la novena, pero dijeron que los policías estaban de guardia. Además, al sábado, el día del siniestro, no fueron notificados de la denuncia (los Muelman)”, sostuvo Amaro.

Sin embargo, de acuerdo con amaro, por una gestión de la presidenta del foro de seguridad de la zona, Mariana Zaracho, los Muelman, finalmente fueron notificados de las denuncias por amenazas.

El incendio y el reclamo a las autoridades

El incendio “empezó en mi pieza que da a la casa (de José Muelman), explota mi moto y explota todo”, relató Amaro. “Si estaba dentro de mi pieza no estaría contando el cuento. Nos quedamos con lo puesto. Las dos familias nos quedamos sin nada”, agregó la joven. De acuerdo con Amaro, ella reside con su pareja y su hijo. En tanto que su prima, vive con otras dos primas, un niño de 2 años y un joven de 23.

En reclamo a las autoridades, Amaro aseguró que hasta el momento “nadie se presentó para darnos un corte de casa. Hay muchas casas vacías, podemos pagar y queremos que nos reubiquen. Tenemos miedo por las amenazas de este señor”, aseguró la joven. Para los interesados en asistir a estas familias, pueden comunicarse al 3764-348572.