
La creciente inseguridad y el aumento del consumo de drogas en los jóvenes pusieron en alerta a los habitantes de Barrio Parque Adam. Etelvina Ferreira, vecina del lugar y trabajadora en un comedor comunitario, compartió con preocupación cómo estas problemáticas afectan tanto a las familias como a los niños del barrio.
“El tema de la seguridad es algo que nos afecta a todos, y es crítico. No solo en nuestro barrio, sino en muchos otros lugares”, aseguró Ferreira. La inseguridad, a su juicio, es una preocupación constante para aquellos que, como ella, se dedican al trabajo social y a mejorar las condiciones de vida de los vecinos.
Uno de los aspectos más alarmantes para la vecina es el auge del consumo de drogas entre los más jóvenes, especialmente en un contexto donde la situación social se va agravando. “La droga ha crecido de una manera desmesurada. Trabajo en el comedor y vemos generaciones tras generaciones, y cómo se incrementó el consumo de drogas en chicos jóvenes”, explicó Ferreira, reflejando una realidad muy dolorosa que se vive día a día en la comunidad.
A pesar de que existen instituciones que organizan charlas y actividades preventivas sobre el consumo de sustancias, Ferreira destacó que los esfuerzos no son suficientes para frenar el fenómeno. “Es algo triste, ya que a veces parece que no se puede parar. El adicto va a robar hasta un sillón, cualquier cosa que pueda vender por monedas para comprar más droga. Van de la mano, el consumo y el robo”, lamentó.
La situación afecta principalmente a los más pequeños, quienes desde una edad temprana están expuestos a estas problemáticas. “Esto comienza desde muy niños, muy chicos. Es una situación que lamentablemente está empeorando con el tiempo”, dijo con preocupación.
La vecina remarcó que este fenómeno no es exclusivo de su barrio, sino que es un problema generalizado en muchas áreas, y que cada vez se vuelve más difícil de abordar. “Esto es general y, lamentablemente, está cada vez peor”, concluyó.