El cambio en las temperaturas trajo un respiro a las panaderías, que experimentaron un significativo repunte en sus ventas tras un largo y caluroso verano. Así lo aseguró Omar Acosta, vicepresidente del Centro Industrial de Panaderos, quien destacó que las lluvias recientes fueron fundamentales para la recuperación de las ventas, que aumentaron un 20% con el cambio climático.

“Estamos contentos con el cambio de tiempo, que es importante y fundamental. El verano fue duro, largo y caluroso, lo que nos trajo problemas en las ventas. Pero ahora, con el clima más fresco, estamos de fiesta”, expresó. Además, explicó que este aumento en la demanda es casi automático con la llegada de las lluvias, lo que permite a las panaderías recuperarse de la caída que sufrieron en los meses anteriores.

En cuanto a las expectativas para la temporada de Pascuas, el comerciante se mostró optimista, aunque señaló que aún es incierto si el repunte se mantendrá hasta fin de año. “Las cosas aumentan en menor proporción que antes, pero seguimos viendo un repunte, especialmente con los productos típicos de Semana Santa”, indicó.

A pesar de las buenas noticias, también hay desafíos. “El huevo tuvo una disparada grande en su precio, lo que está relacionado directamente con la Semana Santa”, comentó. Además, destacó que hay una escasez de crema de leche, que se consigue con dificultad debido a una baja en la producción.