Desde el traslado de los oficiales de la fuerza provincial a distintas penitenciarías, sus familias mantienen una lucha constante, realizando cada viernes a las 19:00 la marcha del silencio frente a la jefatura. Solmaira Cabrera, esposa del oficial Correa, dialogó con Misionescuatro sobre la situación de su esposo y las dificultades que enfrenta su familia.

“Estamos esperando a que se dignen y quieran liberarlos a los chicos”, expresó Cabrera, quien aseguró que han cumplido con todos los procedimientos legales necesarios. “Todo está presentado, pero lastimosamente hay cosas que influyen para que sigan detenidos”, agregó, lamentando la falta de claridad sobre los motivos de la prolongada detención.

“Hasta que ellos quieran, van a seguir detenidos”, advirtió Cabrera, quien también mencionó que la situación es difícil para todos los involucrados. “Todos oramos y mandamos fuerzas para que se vuelva más llevadero”, manifestó, destacando que no hay justificación para que continúen en prisión.

Respecto a las visitas, Solmaira comentó que solo cuentan con unos pocos días para ver a sus seres queridos, quienes comparten espacio con otros detenidos. “Cada vez que los ve, se pone feliz, pero no le gusta verlos en esa situación”, lamentó.

Cabrera concluyó su relato con un mensaje de esperanza: “Seguimos esperando y con fe de que van a salir. No podemos hacer nada más”.