Rolando Silva, vecino del Barrio Itaembé Miní, expresó su indignación ante lo que considera una falta de respuesta y acción por parte del sistema judicial en su denuncia contra su ex pareja. El denunciante, quien se encuentra divorciado desde hace un año, sostiene que las acusaciones de violencia de género que le ha hecho su ex esposa son completamente falsas y carecen de sustento.

En una entrevista con Misionescuatro, Silva aseguró: “Hace dos años que vengo peregrinando con esta situación, expuesta a las autoridades judiciales con las denuncias pertinentes, pero la situación sigue sin resolverse”. Según el hombre, el funcionario judicial encargado del caso no ha cumplido con su labor administrativa de manera adecuada y ha favorecido a la otra parte, ignorando las pruebas que él tiene para respaldar su versión.

Uno de los puntos que más resalta Silva es su solicitud para que su ex pareja fuera retirada de la vivienda que comparten, en pos de un tratamiento psicológico que ella requiere. “Pedí la exclusión del hogar para que ella pudiera recibir tratamiento psicológico, tiene un proceso cognitivo de infancia”, explicó, agregando que ha hablado con el profesional que la atiende, pero que dicho médico mantiene la información bajo secreto profesional.

Silva, quien se describe como una persona humilde y retirada de la fuerza, acusa a su ex esposa de difamarlo y calumniarlo con el fin de quedarse con la vivienda que, según él, le corresponde. “Me difamaron y calumniaron para quedarse con la vivienda, van dos años de esto”, afirmó, y lamentó que el funcionario encargado del caso haya preferido escuchar a la otra parte, lo que considera una tergiversación de la situación.

“Enmascararon todo como una cuestión de violencia de género”, subrayó, destacando que las acusaciones han afectado profundamente a sus hijos, quienes viven con su ex pareja. Silva señaló que sus hijos están siendo dañados psicológicamente debido a la situación judicial que, según él, está siendo manejada de manera incorrecta.

“Mis hijos están siendo dañados psicológicamente”, reiteró, mientras pedía que el caso fuera revisado a fondo para que se haga justicia. El vecino de Itaembé Miní finalizó expresando que tiene pruebas de su inocencia y confía en que la justicia tomará las decisiones correctas.