“Nosotros nos manejamos con el cuerpo de delegados y la discusión interna del sindicato”, afirmó en una postura defensiva ante la pregunta de los periodistas, enfatizando que su papel no es el de oficialismo ni oposición, sino el de representar los intereses de los docentes.

La secretaria general mencionó que en las últimas asambleas se decidió convocar a reuniones rotativas para mantener el debate activo entre los trabajadores. “A nivel provincial hay precarizaciones y se están desmantelando las escuelas públicas con bloqueos de cargos”, explicó.

En la última mesa de negociación, la dirigente planteó el requerimiento formal de la ley de estatuto docente, una norma que regula las relaciones laborales en el ámbito educativo. “Hay una pérdida salarial de más del 99% respecto al costo de vida real”, denunció, lo que ha llevado a un descontento creciente entre los educadores.

“El miedo no está en nuestro vocabulario”, enfatizó Lescaffette, aludiendo a la determinación del sindicato de llevar adelante medidas de fuerza si es necesario. “Si hay que convocar al paro, lo vamos a hacer”, afirmó, dejando claro que la lucha por un salario justo continuará dentro del marco de la negociación con el gobierno provincial en la mesa de “gremios dialoguistas”.

Además, destacó que en asamblea se definió la necesidad de reunirse con otros sectores para unificar los reclamos por la educación pública. “La semana pasada en la mesa no hubo salario. Resolvimos convocar asambleas en las escuelas para mantener el debate”, concluyó.