
Los cambios en la reglamentación de los Parques Nacionales continúan generando debate en el sector turístico. Emilio Simón, presidente del Colegio de Profesionales de Turismo, expresó que, si bien se trata de una modificación importante, es necesario esperar a ver cómo los Parques Nacionales adaptan la medida a sus realidades locales, ya que no todos son iguales y la afluencia de turistas varía considerablemente entre ellos.
“Es un cambio en la reglamentación de los guías y viene de un cambio en la reglamentación de parques nacionales. Permite el trabajo del guía, eliminando algunas obligatoriedades que antes existían”, explicó Simón. Entre las principales modificaciones, destacó la eliminación de la obligatoriedad de contratar grupos o contingentes con empresas de viajes, lo que permitirá una mayor flexibilidad para los guías en la contratación de turistas.
Simón también señaló que la nueva normativa otorga a cada parque la facultad de adherir o no a la reglamentación nacional, lo que genera incertidumbre sobre cómo se aplicará en cada caso. “Se da como cierta gestión de cada parque para adherir o no a la reglamentación”, indicó el presidente del Colegio, asegurando que la figura del guía seguirá siendo fundamental en el funcionamiento del sector.
Uno de los aspectos clave de la reforma es el requisito de examen para los guías, lo que se mantiene como un estándar necesario para ejercer la actividad. Sin embargo, Simón aclaró que, aunque hay preocupación en el sector, no existe temor generalizado, pero sí incertidumbre sobre ciertos aspectos de la reglamentación. “Hay artículos que no son claros y están en veremos. Varios criterios se deben definir aún”, señaló.
En cuanto a la diversidad de los parques, Simón resaltó que existen 39 parques nacionales en el país, cada uno con sus particularidades. “El tema se habló mucho y tenemos 39 parques nacionales muy variados. No se puede tomar a todos por igual”, afirmó. En este sentido, los parques más visitados, como Iguazú y El Calafate, presentan una realidad distinta a la de aquellos con menor afluencia de turistas, como aquellos que reciben menos de 100 visitas anuales.