El padre de Cristian Schaerer, el joven que fue secuestrado en 2003 y del que todavía no hay información sobre su paradero, habló sobre la fuga del principal sospechoso, Rodolfo Lohrman, en Portugal, y dijo que la familia está con “gran desilusión” por la falta de justicia.

Juan Pedro Schaerer se expresó sobre la fuga de Lohrman de una prisión en Portugal, donde cumplía una condena por haber robado un camión de caudales, y en diálogo con Radionord enfatizó que ellos esperaban que sea extraditado a la Argentina para ser juzgado por la sustracción, retención y cautiverio del joven estudiante.

“Estamos con una gran angustia y desilusión porque esperábamos su extradición no sólo para que sea juzgado, sino para saber definitivamente que hizo con Cristian”, manifestó.

En este marco, el hombre sostuvo que el prófugo es el único que sabe dónde está la víctima ya que fue la última persona que lo vio y “el líder de la banda”

Mientras aguardan a tener noticias, Juan Pedro Schaerer destacó que no cree que Lohrman se haya ido “muy lejos”: “Presumimos que está esperando a que todo se enfríe un poco, que la gente lo deje de buscar”.

En la causa por la desaparición del joven hubo dos juicios y 12 condenados, pero a la Justicia del país todavía le resta juzgar al principal sospechoso de liderar la banda que secuestró a Schaerer.

Aunque ya pasaron más de 20 años, la familia de la víctima no pierde las esperanzas de tener información sobre su paradero: “Cada vez que surge un nuevo dato lo investigamos”.

Por último, sobre la necesidad de que vuelvan a detener a Lohrman, el padre del desaparecido expresó: “Esperamos que lo extraditen y que podamos negociar con él para que nos diga que hizo con Cristian”.