El Instituto Nacional de Salud (INS) del Ministerio de Salud (Minsa) de Perú ha detectado los primeros 12 casos del linaje JN.1 del Covid-19 en ese país, considerado un descendiente del mutado linaje BA.2.86, conocido coloquialmente como ‘pirola’.

Estos casos se identificaron mediante muestras respiratorias recolectadas entre el 14 y 28 de noviembre en diversas localidades de Lima y la región San Martín, en pacientes de entre 23 y 58 años, quienes actualmente se mantienen en condición estable y con tratamiento ambulatorio.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado a JN.1 como una variante de interés a nivel mundial el 19 de diciembre de 2023, luego de un rápido aumento de casos, especialmente en los Estados Unidos, donde ahora es el segundo linaje más prevalente.

Con muchas mutaciones y una rápida dispersión, JN.1 se detectó en 43 países, incluyendo Estados Unidos, Canadá, México y Brasil.

Según la OMS, tiene un “bajo riesgo” para la salud pública y no parece causar síntomas más graves que otros linajes de ómicron.

Las actuales vacunas contra COVID-19, incluyendo la bivalente, siguen ofreciendo protección contra formas severas y muerte.

Síntomas

Ricardo Peña, viceministro de Salud Pública del Minsa de Perú, explicó que no hay diferencias significativas en lo que respecta a los síntomas.

Lo recomendable es profundizar los cuidados y utilizar mascarilla si se presentan síntomas de una posible infección respiratoria.

 “En estos casos, la protección que ofrece la vacuna es sumamente clave. Es importante que todas las personas se vacunen y completen sus refuerzos porque eso reduce los contagios en las personas vulnerables, en las que este tipo de infecciones representan una real amenaza”, explicó Peña.

Por su parte, la OMS informó que los síntomas que causa la variante JN.1 no son tan fuertes como otras que generan fiebre o escalofríos, tos, dificultad para respirar, fatiga, dolores musculares, dolor de cabeza, y lo que más se presentaría es dolor de garganta y congestión.