La movida surge en medio de acusaciones de intentos de politización por parte del gobierno provincial de la Renovación, que se vieron frustrados con el fracaso de la gestión de Petterson y la campaña infructuosa del Ministro del Agro, Facundo López Sartori, para recolectar firmas.

El escándalo que rodeó la destitución de Petterson por múltiples irregularidades ha dejado al descubierto una serie de violaciones legales durante su gestión como director de producción. Según denuncias de la Asociación de Plantadores del Nordeste Argentino (APNEA), Petterson ocupó ilegalmente el cargo, aprovechándose de recursos del INYM para beneficio personal. Además, se le acusa de ocultar su condición de empleado público de la Honorable Cámara de Representantes de Misiones, situación prohibida por ley para ocupar cargos directivos en instituciones como el INYM.

El directorio del INYM actuó rápidamente suspendiendo y posteriormente expulsando a Petterson el 18 de julio de 2024, dejando en claro un cambio de rumbo en la dirección del instituto. Se espera que las acciones legales contra Petterson incluyan cargos por falsificación de documento público, falsificación de declaración jurada y posible malversación de fondos públicos.

El impacto del escándalo no solo afecta la reputación del INYM, sino que también plantea interrogantes sobre la posible complicidad de ex autoridades, quienes podrían haber sido conscientes de la situación sin tomar medidas al respecto.

Con estos antecedentes, la Comisión Directiva está determinada a restaurar la integridad y eficacia del INYM, priorizando la elección de un nuevo presidente con un perfil técnico sólido y arraigo en el sector agrícola misionero.