La violencia de género y familiar dentro de las fuerzas policiales de Misiones sigue siendo un tema de preocupación. Según el Gabinete Interdisciplinario de la Dirección de Asuntos de Familia y Género de la Policía, se registran, en promedio, 200 casos anuales que requieren seguimiento y atención especializada. Estos casos son abordados a través de un protocolo activado inmediatamente al tomar conocimiento de la situación, establecido en la disposición 209 de 2019.

Soledad Herrera, responsable del gabinete, explicó que las situaciones de violencia familiar son diversas y abarcan conflictos de pareja, ex parejas, así como problemas relacionados con los hijos, régimen de visitas y cuotas alimentarias. “Hoy entendemos que la violencia no solo tiene manifestaciones físicas, sino que también puede ser psicológica, económica o emocional”, afirmó Herrera, destacando que la percepción de la violencia ha evolucionado en los últimos años.

El protocolo para abordar estos casos implica un procedimiento específico para acompañar a los policías involucrados, garantizando tanto su protección como la de las víctimas. “Se ha hecho visible la posibilidad de realizar una denuncia, lo que ha permitido a muchos efectivos reconocer la situación y tomar las medidas necesarias”, indicó.

El seguimiento estadístico de estos casos se realiza anualmente, y aunque se observa una cifra de más de 200 actuaciones, las autoridades destacan que algunos casos corresponden a reincidencias, lo que subraya la complejidad del fenómeno. Con el objetivo de erradicar la violencia dentro de la misma fuerza, el gabinete continúa trabajando en la sensibilización, prevención y acompañamiento de las víctimas.