Con la llegada de bajas temperaturas y heladas, Delapierre señaló que, aunque las recientes heladas no representan un problema significativo para las plantaciones, existe una inquietud considerable respecto a los brotes durante la cosecha.

“Las heladas no fueron nada grave, son normales para esta época”, aseguró. “La yerba mate puede resistir hasta 2 grados bajo cero, pero durante la cosecha, las heladas pueden quemar los brotes, lo que podría resultar en mínimas pérdidas.”

Además de las condiciones climáticas, Delapierre hizo referencia a la reunión reciente en Dos de Mayo, donde se discutió ampliamente la ley de promoción de bioinsumos y, en particular, el artículo 7 que prohíbe el uso del glifosato, herbicida ampliamente utilizado en la provincia.

“El jueves próximo los diputados deben tratar el tema de cambiar el artículo que prohíbe el uso de glifosato”, afirmó. “El glifosato no tiene reemplazo y proponemos suspender la prohibición hasta que aparezca un producto que lo sustituya.”

Delapierre también expresó su preocupación por la falta de consulta con las grandes asociaciones de productores antes de la redacción de la ley. “No hubo consultas con las grandes asociaciones de productores”, señaló. “Es crucial revisar esta legislación para permitir el uso continuo del herbicida sin problemas.”

La reunión en Dos de Mayo, que contó con una gran participación, incluidos representantes de Buenos Aires, podría ser determinante para el futuro de la ley de bioinsumos y su impacto en la producción de yerba mate.