La manifestación tuvo lugar frente a la Casa de Gobierno, donde los retirados buscaban visibilizar las medidas que, según afirman, las autoridades están tomando en su contra. Flores señaló que previamente habían presentado notas solicitando la apertura de paritarias, respaldadas por un compromiso firmado por el Gobierno provincial que prometía discutir estos temas antes de diciembre. Sin embargo, a pesar de la insistencia, el diálogo fue cerrado por las autoridades.

En diálogo con Misionescuatro, Flores destacó la pérdida del 60% del poder adquisitivo experimentada hasta diciembre, afectando significativamente la calidad de vida de los retirados y sus familias. Además, subrayó la necesidad urgente de atención a cuestiones básicas como educación, vestimenta y salud para sus hijos.

Uno de los puntos críticos expuestos fue la situación en el Instituto de Previsión Social (IPS), donde la atención para los afiliados se encuentra baja, limitando la posibilidad de elección de prestaciones. La falta de camas y turnos en el sistema de salud también fue resaltada, junto con la dificultad de acceder a otras obras sociales debido a la afiliación al IPS.

A pesar de los reclamos y presentaciones previas, las autoridades proponen dialogar el próximo mes, lo cual fue considerado tarde por el grupo. Flores expresó la intención del grupo de agotar instancias sin recurrir a medidas drásticas como el corte de calles, enfatizando la búsqueda de un diálogo constructivo con soluciones inmediatas.

La manifestación de este jueves se suma a la serie de acciones llevadas a cabo, incluyendo una previa en octubre que resultó en un reajuste en noviembre.

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