[vc_row][vc_column][vc_column_text]Fue 4-2 en el Centenario. Los de Tabárez se metieron en su tercer Mundial al hilo.[/vc_column_text][vc_single_image image=”136633″ img_size=”full” alignment=”center”][vc_column_text]Un empate le aseguraba a Uruguay su boleto directo al Mundial. ¿Debía exponerse más de lo aconsejable y tentar innecesariamente a la suerte? No era aconsejable. Casi sin exigirse, más allá de la sorpresa inicial por ese gol en contra inesperado que enmudeció a medio estadio Centenario, edificó una victoria tranquilizadora que lo deposita en Rusia. La diferencia con Bolivia fue más que el 4-2 que finalmente selló la chapa. Pudo ser más abultado, pero algunos intentos fallidos por poco y el palo izquierdo ahogaron otros gritos de gol.
Con esta victoria el seleccionado de Oscar Tabárez concluyó la eliminatoria en el segundo puesto al sumar 31 puntos, para quedar a 10 del líder Brasil. Además, los dos tantos que convirtió Luis Suárez le permitieron alcanzar los 21 y compartir el lauro de máximo goleador histórico junto con el argentino Lionel Messi.[/vc_column_text][vc_single_image image=”136634″ img_size=”full” alignment=”center”][vc_column_text]Tenía que ser un trámite la clasificación uruguaya. La ilusión se palpaba en cada espectador, ese sufrimiento que los acompañó en las últimas jornadas tenía que llegar a su fin con el objetivo cumplido. Ejerció una presión asfixiante y maniató a su oponente con una línea de volantes joven, que propone juego y marca el necesario recambio generacional. Por momentos fue imparable, con el fragor y el vértigo que se le exigía. Contó con algunas aproximaciones con buenas combinaciones entre Luis Suárez y Edinson Cavani. Sin embargo, los intentos se iban desviados.
Todo se le complicó al promediar la etapa. Un envío profundo desde el lateral de José Sagredo a la cabeza de Marcelo Moreno Martins y el delantero la bajó para Alejandro Chumacero. Apresurado, Diego Godín intentó el rechazo con tal mala fortuna que la pelota rebotó en la pierna derecha de Gastón Silva y dejó sin reacción a Muslera. Insólito gol de Bolivia.
Uruguay mantuvo la calma, controló el juego y reaccionó. Un desborde y el envío cruzado y largo de Luis Suárez, en el sector opuesto la tomó Gastón Silva para volver la pelota hacia el área y encontrar bien ubicado a Martín Cáceres, quien la punteó para establecer el transitorio empate.
Faltaba una emoción más. Centro calibrado de Silva y Cavani, con un certero cabezazo, no perdonó y lo dejó sin chances a Carlos Lampe.[/vc_column_text][vc_single_image image=”136635″ img_size=”full” alignment=”center”][vc_column_text]La voracidad uruguaya no se detuvo en el segundo tiempo. Asistencia profunda de De Arrascaeta y derechazo letal de Luis Suárez. Otro pase filtrado de Cristian Rodríguez para el delantero de Barcelona, que se deshizo de la marca de Gabriel Valverde y sacó un remate cruzado al palo izquierdo, imposible para Lampe.
Los minutos finales aportaron otro gol en contra, esta vez con un cabezazo hacia atrás de Godín que descolocó a Muslera, y un zurdazo potente del Cebolla Rodríguez que se estrelló en el palo. A un costado, el Maestro Tabárez ya celebraba alborozado porque Uruguay irá por cuarta vez (1990, 2010 y 2014) a la Copa del Mundo.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][vc_column_text]Clarín / vm.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
