Política

Gastos millonarios en absurdo proyecto de Rovira

cargando anuncio

Bajo la gobernación de Carlos Rovira, el Estado provincial impulsó la industria del vino, para lo cual adquirió máquinas en Alemania, contrató enólogos de Chile y junto con la Universidad de Misiones y el Inta de Cerro Azul, se erigió una bodega y se aportaron fondos para cultivos de viñedos.

Gastos millonarios en absurdo proyecto de Rovira

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Bajo la gobernación de Carlos Rovira, el Estado provincial impulsó la industria del vino, para lo cual adquirió máquinas en Alemania, contrató enólogos de Chile y junto con la Universidad de Misiones y el Inta de Cerro Azul, se erigió una bodega y se aportaron fondos para cultivos de viñedos.[/vc_column_text][vc_single_image image=”197423″ img_size=”full” alignment=”center” title=”Foto crédito de Sixto Fariña”][vc_column_text]POSADAS. La experiencia de un millonario proyecto de Carlos Rovira, resultó malísima. Transcurrido doce años, todavía se ignora cuanto le costó al erario una idea carente de fundamentos.

Hoy en el lugar donde en algún momento funcionó la bodega para elaborar las marcas “Laterita” y “Cascadas”, todo es abandono.

Tampoco se consiguió ampliar los viñedos dada las condiciones climáticas, edafológicas y  el ecosistema que se requiere para producir vinos que puedan competir en un mercado harto competitivo.

Desde que surgió la idea -eran tiempos en que los fondos oficiales se desparramaban sin control alguno- técnicos locales se animaron a expresar su rechazo.

Así sucedió: repasando medios de aquella época, manifestaron que en Cerro Azul no había suficiente materia prima. Por ende, funcionarios locales viajaron a Mendoza para traer el mosto Cabernet Sauvignon.

En rigor, desde la colonización, chacareros de Cerro Azul, Olegario Andrade y alrededores disponen de pequeñas parcelas de donde se hace un vino artesanal, apuntando al autoconsumo. La zona dista 60 kilómetros de Posadas.

Algunas uvas comenzaron a venderse después en ferias franjas, pero nunca se alcanzaron los 30.000 litros que proponía el absurdo proyecto. “Sin uva, nunca hubo mosto en la cantidad necesaria”, observaron los expertos.

Entre los críticos de entonces que advirtieron el fracaso, cabe mencionar a los ingenieros Miguel López, Juan Pujato, Roberto Montechiessi y Hugo Fassola.[/vc_column_text][vc_single_image image=”197428″ img_size=”full” alignment=”center”][vc_column_text]

¿Que pasó?

No obstante, recursos públicos valiosos se destinaron a la construcción e instalación de una Bodega Escuela, importándose equipos e insumos costosos, durante la gobernación de Carlos Rovira, quien desde 2007, es Presidente de la Cámara de Representantes. Además de otros gastos en consultorías, contratos profesionales, mano de obra.

La realidad demuestra hoy -frente al total abandono de las instalaciones- que se trató de otro proyecto inútil promovido por gobernantes que desde 2003, siguen manejando el oficialismo K.

Corresponde consignar asimismo, opiniones acerca del cuadro de situación en torno de la fabricación de vinos en esta provincia.

1) Misiones no posee regiones apropiadas para el cultivo de la vid. Llueve en demasía y por lo tanto se deben realizar tratamientos fitosanitarios para controlar  enfermedades.

2) Se contrapone con la imagen que se ha difundido en el mundo que los vinos argentinos son ecológicos por naturaleza, porque los viñedos en la zona cuyana y de los valles norteños del oeste no requieren agroquímicos. Si requieren azufre y caldo bordelés, permitidos universalmente.

3) Los vinos de Misiones (desconocidos comercialmente) carecen de la calidad requerida. Es factible obtener en zonas de secano con riego. Pero el factor más importante: no hay amplitud térmica durante la época de crecimiento y madurez de la fruta, que requiere de noches frescas.

4) Considerando tales factores, parece injustificable que se haya levantado una bodega experimental. Para producir vino bueno hace falta partir de viñedos idóneos.

5) No debería haberse perder tiempo, presupuesto y esfuerzos en proyectos relacionados con la vitivinicultura, existiendo en el país aproximadamente 200.000 hectárea (casi el 70% en Mendoza) implantadas en regiones pedemontanas, propicias para producir vinos de calidad y que sí necesitan del apoyo institucional para seguir investigando.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][vc_column_text]

FSB.

[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]

Comentarios