Los cítricos se caracterizan por su sabor ácido e intenso, además de ser saludables (si se consumen sin exagerar), por su aporte de aceites esenciales. Además, su aporte calórico es bajo y alto en fibras.

Siempre conviene saber cómo combinar mejor cada una de estas frutas. A continuación, los detalles

–Limón: es el más ácido de todos los cítricos. Por eso, su uso limita el aderezo de las comidas, ya que en exceso puede tapar los demás sabores de tu plato. El limón es ideal para reemplazar al aceite o el vinagre en un condimento, o incluso para realzar el sabor de tus platos con pescado.

-Naranja y mandarina: son las dos frutas más utilizadas para ser consumidas como jugos exprimidos, principalmente a la hora del desayuno y también para incluir en cualquier tipo de guiso, sobre todo a los que lleven carne, porque ayudan a neutralizar la grasa y ablandarla.

–Pomelo: si bien es el menos consumido por ser el más amargo, es también muy útil a la hora de realzar los sabores de las comidas. Además, es el cítrico menos calórico y el más diurético.

Se puede usar como aderezo de ensaladas para potenciar el sabor de platos a base de pescados o en postres.

¿Cuál es tu cítrico favorito?