Habrá una final inesperada en el Argentina Open 2024. También un campeón inédito. Que no esté Carlos Alcaraz, número 2 del ranking mundial y defensor del título eliminado este sábado por un impecable chileno Nicolás Jarry, representa una sorpresa mayúscula. Lo mismo que el ganador del duelo argentino, el bonaerense Facundo Díaz Acosta, que recibió una invitación para poder acceder al cuadro principal y este domingo jugará el último encuentro tras vencer a Federico Coria.
En un estadio en el que no quedó una butaca libre (las entradas para el día se agotaron horas antes del comienzo del primer partido), Alcaraz sufrió demasiado con el servicio de Jarry. Ya lo había avisado Carlitos en la previa del duelo: ante un sacador potente como el chileno, tendría que tomarse su tiempo para leer el partido y encontrar cómo jugar con su devolución.
El murciano no arrancó sólido y cedió por 7-6 (7-2) el primer set ante el chileno. Las estadísticas le dieron la razón al murciano, navegó sin grandes problemas sus games de servicio, pero estuvo más errático en los de rival y no consiguió imponer su juego.
Y eso que la gente no dejaba de apoyarlo. En un descanso, se escuchó “Carlitos, hoy sos más argentino que nunca”. Alcaraz asintió con la cabeza y el estadio estalló.
Sin quiebres por lado, el set llegó al tie break, en el que el español hizo lo que no venía haciendo, errar con el saque. Cometió dos doble faltas (las primeras del partido), que le permitieron a Jarry sacar una ventaja inicial de 3-1, que luego mantuvo para llevarse el desempate con soltura.
El segundo set valió cada centavo de la entrada. Con los dos enchufadísimos y un ambiente caliente -el duelo entre los chilenos que coparon algunos rincones de las tribunas y los argentinos le dio un marco increíble-, el parcial fue un verdadero espectáculo. El español quebró de entrada, pero la potencia del drive de Jarry no lo dejó sostener la diferencia.
El chileno jugó en un nivel altísimo, equivocándonse poco y sacándole el jugo a su drive y su saque. Y en el octavo game, logró un nuevo break, que lo dejó 5-3 arriba. Con saque, después, necesitó un par de match points para apretar el puño y meterse en la final.
Alcaraz, que está disputando su primer torneo sobre polvo de ladrillo desde Roland Garros 2023, no mostró su mejor versión a lo largo de la semana (esa imbatible que lo llevó a convertirse en el número 1 más joven de la historia y a ser dueño, con solo 20 años, de dos Grand Slams) en el certamen. Por momentos, en sus primeros dos encuentros, estuvo más errático que de costumbre.
El español no sacó tan fácil el duelo de su debut ante Camilo Ugo Carabelli, que había surgido de la qualy pero le dio batalla (fue 6-2 y 7-5). Y necesitó un tie break para vencer a otro rival salido de la fase previa, el italiano Andrea Vavassori, en cuartos (7-6 (7-1) y 6-1).
Jarry, 21° del ranking, se metió en cuartos a última hora del viernes beneficiado por el abandono por lesión (un desgarro en la pierna derecha, como se confirmó este sábado) de Tomás Etcheverry. El platense se retiró antes del inicio del tercer set, luego de haberse llevado el primero por 6-4 y cedido el segundo por 5-7.
Para el entrenador por Juan Ignacio Chela será la chance de obtener su cuarto título ATP, con la particularidad que todos serían sobre polvo de ladrillo: Bastad 2019, Santiago de Chile 2023 y Ginebra 2023.
La semana inolvidable de Díaz Acosta
Facundo Díaz Acosta difícilmente se olvide de esta semana en el Buenos Aires Lawn Tennis: llegó al Argentina Open 2024 como invitado de la organización y este sábado se metió en la final del torneo al superar a Federico Coria por 6-2 y 6-3 en una hora y 24 minutos. El bonaerense, 87° del ranking, avanzó por primera vez a la instancia decisiva de un torneo ATP, en la que podría darse un gusto grande.
En el arranque de una jornada de intenso calor, Díaz Acosta jugó un gran partido y levantó un primer set en el que su rival había arrancado mejor. Porque Coria, 106° del ranking, se plantó bien en el fondo de la cancha en el arranque y se puso rápidamente en ventaja. Quebró en el primer game y luego se alejó 2-0. Pero fue todo lo que pudo hacer en ese parcial.
Porque Díaz Acosta tardó en acomodarse en la cancha, pero cuando lo hizo empezó a jugar mejor. Más cómodo con su devolución y más fino con sus tiros (metió varias pelotas en las líneas, que fueron inalcanzables para el rosarino), empezó a imponer su juego. Y ganó seis games al hilo (con tres breaks) para llevarse el set.
Muy parejo arrancó el segundo. Coria no estaba dispuesto a dejar que el pase a la final se le escapara tan rápido y salió a presionar más y Díaz Acosta erró más de lo que había errado en el capítulo inicial. Así, ninguno logró desnivelar el marcador en los primeros siete games. Pero el bonaerense golpeó en el momento justo: quebró en el octavo, para quedar 5-3 arriba, y luego selló la victoria en su primer match point.
Díaz Acosta, campeón el año pasado en los Juegos Panamericanos de Santiago, extendió así su buena racha. La semana pasada, alcanzó por primera vez los cuartos de final de un ATP al llegar a esa instancia en Córdoba (perdió con Sebastián Báez). Y en el BALTC jugó en un gran nivel y se anotó grandes victoria ante el alemán Daniel Altmaier, Francisco Cerúndolo, cuarto favorito y el serbio Dusan Lajovic, antes de vencer a Coria para alcanzar por primera vez una final en el circuito más importante del tenis.
Coria se quedó con las ganas de meterse en su tercera final, después de Bastad 2021 y Córdoba 2023. Pero igual cerró un gran torneo, ya que jugó por segunda semana consecutivas unas semis (había llegado a esta instancia hace siete días en Córdoba) y además se aseguró el regreso al top 100 (aparecerá este lunes 85°), uno de sus objetivos para el arranque de esta temporada.
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