En sus declaraciones, Stockmans expresó su felicidad y destacó el trabajo constante que realizó a lo largo de su carrera, subrayando que ahora están cosechando los frutos de ese esfuerzo, con el valioso respaldo de su equipo y familia.

“Fue un largo año de compromiso, mucho esfuerzo y constancia de todas. Fue lo que nos propusimos y lo logramos trabajando duro. Nos fue bien y es un buen premio”, compartió la jugadora, resaltando el trabajo en equipo como clave para alcanzar el éxito.

La bicampeona no solo se enfoca en su propio rendimiento, sino que también se dedica a ser un modelo a seguir para las generaciones más jóvenes. “Tratamos de que las más pequeñas nos vean y sientan un buen reflejo. Demostrarles y enseñarles el esfuerzo de cada día, entrenar físicamente, en la cancha, y respetar a árbitros y público. Todo contribuye al crecimiento del básquet femenino y a la propia persona como jugadora”, añadió.

La jugadora destacó el crecimiento significativo del deporte desde el año anterior y subrayó el esfuerzo del equipo para convertir cada partido en una verdadera celebración. Recordando el apoyo de los fanáticos, mencionó: “En el momento estábamos concentrados en el partido, pero al ver el video da mucha emoción y alegría el acompañamiento de la gente. No había lugar y estaba llenísimo”.

Además de sus logros en la cancha, Stockmans compartió que, como madre de una niña de 5 años, logró mantener todo organizado y dedicar tiempo diario al básquet, demostrando que, con dedicación y esfuerzo, se pueden alcanzar metas tanto en el deporte como en la vida personal.