Acuña explicó que este índice evalúa la percepción ciudadana sobre la corrupción en cada país mediante encuestas e indicadores, proporcionando así una medida de la “sensación térmica” respecto a este fenómeno. Señaló que clasifican a 180 países, otorgando el primer puesto al menos corrupto y el último al más corrupto.
En referencia a Argentina, Acuña reveló que, en la edición de 2023 del índice, el país se ubicó en el puesto 98. Esta posición, según el análisis del analista, coloca a Argentina en la mitad de la tabla para abajo, situándola entre los países con mayores índices de corrupción a nivel mundial.
El análisis de Acuña destaca la importancia de estas mediciones internacionales para comprender el panorama de la corrupción a nivel global y su impacto en la percepción pública.