VALLADOLID. El actor británico Malcolm McDowell asistió anoche a la exhibición del documental “La naranja prohibida”, de Pedro González Bermúdez, en la que su voz aparece entre otras, durante la celebración de la Seminci o Semana Internacional de Cine de Valladolid, referida al accidentado estreno en España de “La naranja mecánica”, tal como se tituló en ese país, publicò hoy la prensa peninsular.
Ello sucedió en 1975, a seis meses de la muerte del dictador Francisco Franco, ya que la película de Stanley Kubrick, que este año cumple medio siglo, tuvo que sufrir por su violencia coreográfica indecibles contrariedades, antes de transformarse en un clásico del cine.
Según Télam, el film fue retirado de circulación en el Reino Unido por, presuntamente “incitar a la violencia”, condenada a la categoría de película X en Estados Unidos. Y, finalmente se pudo ver en España: el 24 de abril de 1975, una cola de entusiastas vallisoletanos insomnes pasaron la noche en vela para conseguir la entrada que les permitiera ver lo prohibido.
McDowell, el actor y mítico protagonista en la piel de Alex DeLarge de la cinta, dijo no acordarse de nada de lo que ocurrió en la ciudad castellana entonces. “Es una sorpresa descubrir que después de todo este tiempo aún quedan historias por contar de la cinta de Kubrick”, apuntó ante un cúmulo de periodistas que trataban de encontrar en ese hombre mayor, rastros del “drugo” que interpretó en el filme.
El joven actor que no conocía a Kubrick en una película que sería un clásico
Ahora es el narrador del documental de González Bermúdez y sobre su aparición en aquella obra cumbre refirió: “Era muy joven entonces y cuando me dijeron que me llamaba Stanley, creía que era otro Stanley. Luego, él mismo me hizo saber que me había visto en ‘If…’, de Lindsay Anderson. Y que me quería para su nueva película. Solo sabía que él era el director de ‘2001: odisea del espacio’, la cinta de ciencia-ficción que revolucionó el género, y que cuando le pedí información sobre mi personaje en ‘La naranja…’ su contestación fue que ese era mi trabajo”, comentó a modo de presentación.
“En realidad, la película era pertinente entonces, puesto que habla de la censura y de la libertad. Y lo es ahora. Han cambiado las formas de censuras y opresión. Pero el problema de fondo se mantiene intacto. En la década de los 70 un régimen prohibía que se viera una cinta para ocultar la verdad. Ahora, las ‘fakes news’ hacen que la verdad sea irrelevante. Han cambiado los modos; el problema de fondo es el mismo”, reflexionó.
El lanzamiento de la película de Kubrick se produjo el 19 de diciembre de 1971 en Nueva York y San Francisco, antes de llegar a Londres en enero de 1972. En la Argentina, bajo la dictadura de Lanusse, fue prohibida por el Ente de Calificación Cinematográfica y su estreno fue casi 14 años después, en julio de 1985, durante el gobierno democrático de Raúl Alfonsín.
Sobre su relación con el director, McDowell expresó con cierta melancolía: “No volví a ver nunca más a Stanley. Aunque sí hablamos por teléfono varias veces. Fue muy extraño… Yo era joven, me sumergí en una relación profundamente familiar con él. Y, completado el rodaje, se acabó. Lo sentí como un divorcio, y lo lamento. Sin embargo, hicimos un filme extraordinario”, remató.