El cuerpo humano está compuesto por un 60-70 por ciento de agua, pero esta cantidad se va perdiendo a lo largo del día por la orina y el sudor. Por eso, para que el organismo funcione de buena manera forma, el agua es el elemento ideal que hay que consumir.
Beber agua significa un sinfín de beneficios, entre ellos, mejoras en el aspecto de la piel, mantenimiento del peso y la temperatura corporal. También ayuda a la salud de los riñones y prevención de la deshidratación.
Los especialistas en salud y nutrición recomiendan tener a mano siempre una botella de agua.
También comenzar a generar el hábito es ponerse alarmas que avisen que hay que tomar un vaso de agua.
Uno de los principales problemas de la falta de ingesta del agua es la deshidratación. Tener sed significa un problema, o el comienzo de uno si no se revierte. Si bien lo correcto es tomar agua en ese momento, es importante saber que lo ideal es beber antes de que el cuerpo lo pida.
Por otra parte, la mayoría de las frutas y algunos vegetales se componen de gran cantidad de agua. Por lo tanto, son opciones válidas para completar la cuota diaria de líquido.