Lo primero que tenés que hacer es contar con los siguientes materiales: semillas de limón, agua, tierra y una taza mediana. Habrá que colocar las semillas en el recipiente con agua tibia y dejar germinar.
El tiempo ideal para que crezca bien es de dos a tres días. De otra manera, no encontrarás un buen resultado.
Una vez cumplido ese lapso, agregar la tierra. Luego colocar las semillas germinadas con un poco más de tierra.
Al cabo de unos días, el limonero comenzará a crecer y, poco a poco, irá aromatizando cada rincón de tu casa.
Se trata de un interesante método para darle un olor increíble a limones a cada rincón de tu casa.