En primer lugar, la mayor atención debe prestarse al agua: es necesario garantizar un riego diario de las plantas, cuidar del excesivo sol y estar atento al crecimiento de los yuyos o los ataques de los insectos.
Por eso, hay que comenzar con algunas tareas de limpieza, quitando las hojas y flores marchitas y todas las malezas. Esto les permitirá a las plantas seguir creciendo y desarrollándose saludablemente.
Lo que se puede sembrar en febrero
Hay verduras que se siembran en verano, como es el caso de la lechuga, acelga, zapallitos, perejil, rabanito, remolacha, repollo, achicoria, rúcula, zanahoria, espinaca, puerro, apio, cebolla y escarola.