La aldea se llama Santo Stefano di Sessanio, es un pueblo medieval amurallado en la región italiana de Abruzzo (al este de Roma, con una costa Adriática y los Montes Apeninos). Este lugar está dispuesto a pagar a las personas que quieran mudarse y comenzar un negocio allí.
Es otro de los tantos pueblos que buscan rejuvenecer a su población y evitar que sus calles queden prácticamente desoladas, cuenta sólo con 115 vecinos, aunque durante el año viven allí solo entre 60 y 70, siendo la mitad jubilados y menos de 20 de ellos son niños menores de 13 años.
Para ello desde Santo Stefano di Sessanio lanzaron una convocatoria para atraer a nuevos residentes, a los cuales se les abonará un sueldo al año de 8.000 euros, o 9.500 dólares, durante 3 años.
Además, desde el municipio anunciaron que ayudarán a los nuevos vecinos con una contribución única de hasta 20.000 euros para poner iniciar un negocio empresarial y ofrecerá una propiedad por un alquiler simbólico (aún no han especificado cuánto sería exactamente).
Desde que abrieron la convocatoria, el 15 de octubre, se han inscripto más de 1.500 personas. Sin embargo, el cupo es muy limitado, por el momento sólo buscan a 10 personas o 5 parejas para que se muden a la localidad italiana.
Algunas de las actividades comerciales que se pueden realizar allí son: ser guía de turismo, trabajar en la oficina de información, cumplir un trabajo administrativo en la municipalidad, realizar tareas de limpieza, poner una farmacia o vender comida típica de la zona.
Esta pequeña aldea se encuentra a 1.250 metros sobre el nivel del mar dentro del parque nacional Gran Sasso e Monti della Laga. El pueblo grande más cercano es L’Aquila, a media hora de distancia. Roma está a unas 2 horas, y la costa del Adriático está a 90 minutos en coche. El aeropuerto más cercano es Pescara, también a 90 minutos.
Aquellos interesados en mudarse a la aldea pueden ingresar a la página oficial del municipio de Santo Stefano di Sessanio y completar el formulario. Hay tiempo hasta el 15 de noviembre.