Detuvieron a un párroco de Jujuy, acusado del delito de abuso sexual de una niña de 10 años en un domicilio del centro de la ciudad de El Carmen. Además, la justicia provincial trabaja en la identificación de al menos dos personas más que serían cómplices de este aberrante hecho.
El imputado es Ricardo Oscar Quiroga, alias “Padre Cocó”, quien fue detenido tras ser acusado de “abuso sexual con acceso carnal doblemente calificado por ser cometido por dos personas y por ser miembro de un culto religioso”.
Si bien se está investigando, el hecho habría ocurrido entre los días 22 y 25 de octubre, cuando una mujer de la que no trascendió la identidad, llevó a una niña a un domicilio de la calle Rivadavia del barrio Centro de la ciudad de El Carmen. Allí el cura habría abusado de la menor, junto a otro cómplice que todavía no fue identificado.
Tras el abuso, la entregadora se llevó a la nena, la bañó e hizo desaparecer la ropa interior con el fin de ocultar pruebas. Esta mujer habría cobrado una suma de mil pesos por llevar a la menor con el ministro de la Iglesia católica.
La investigación del caso recayó sobre el fiscal de investigación penal preparatoria de ciudad Perico, Darío Osinaga.
Luego de la denuncia y el lapidario informe médico legal del Ministerio Público de la Acusación, la justicia jujeña ordenó la detención e imputación del párroco.
Se estima que en las próximas horas se proceda a la aprehensión de más personas como cómplices y/o partícipes en este aberrante hecho de abuso sexual contra una nena de tan solo 10 años.
El aberrante hecho tomó estado público el mismo lunes, cuando se llevó adelante la detención y causó mucha indignación no solo en la localidad de El Carmen dónde desempeñaba sus funciones, sino en toda la provincia, ya que era un cura muy conocido y respetado por la comunidad católica.
Por su parte, el Obispado de Jujuy emitió un comunicado en el que informaron la suspensión del religioso.
“El Obispado de Jujuy, habiendo tomado conocimiento por los medios de comunicación social de la investigación penal que obra en contra del presbítero Ricardo Quiroga por un posible delito, desea expresar que se pone a entera disposición de la Justicia para todo lo que haga lugar. Ante esta situación, se ha procedido, cautelarmente, como primera medida, a suspender al sacerdote el ejercicio del ministerio sacerdotal. Además, este obispado expresa su compromiso irrenunciable de rechazar cualquier acto que amenace la dignidad de las personas, especialmente, de los menores y personas vulnerables. Nuestra cercanía y disposición con las eventuales víctimas y familias”, reza la misiva.