Los legisladores del “misionerismo” nuevamente mostraron su subordinación al esquema de gobierno kirchnerista y aportaron sus votos para la sanción del Consenso Fiscal y la prórroga de impuestos.

Pese a que en el discurso local el gobierno Renovador intenta mostrarse autónomo, cada vez que el kirchnerismo requiere auxilio, el frente gobernante de Misiones juega un rol clave para las apetencias de Alberto Fernández y Cristina Kirchner y especialmente para la ratificación de las actuales políticas económicas.

Durante la campaña electoral del 2021 fue el mismo “misionerismo” quién acusaba a los candidatos de Juntos por el Cambio de ser “delegados” del poder central; sin embargo, con el paso del tiempo y las votaciones, quedó claro quiénes levantan sus manos por mandato partidario y quiénes no.

El histórico e incondicional voto en bloque de los diputados renovadores exhibe con claridad la dependencia al poder del kirchnerismo, a pesar del esfuerzo sobrehumano para mostrarse fuera de la transversalidad cristinista.

“Solo los hechos, dan fe a las palabras”, reza un slogan Renovador.

Por Eduardo Pérez