El propietario de la vivienda, identificado como R. Bruno de 22 años, relató que el siniestro se desencadenó luego de arrojar una colilla de cigarrillo al suelo en su habitación. Al regresar a la habitación tras dirigirse a la sala, Bruno se encontró con que las llamas habían consumido gran parte de la vivienda.
Ante la situación de emergencia, el propietario abandonó rápidamente el lugar y solicitó ayuda a su vecino, F. Gilberto, quien acudió en su auxilio. Ambos intentaron extinguir el fuego, pero las llamas ya habían causado estragos significativos en la estructura de la vivienda.
La rápida respuesta de los vecinos alertó a las autoridades, quienes enviaron una comisión policial al lugar. A su llegada, constataron que la vivienda se encontraba totalmente consumida por las llamas, resultando en pérdidas materiales totales.
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