POSADAS. Estalló la interna en la Unión Cívica Radical – Misiones con motivo de la precandidatura a diputado nacional dentro de Juntos por el Cambio, que actualmente se disputan el concejal de Posadas, Martín Arjol y el diputado provincial, Gustavo González.

Fuentes consultadas aseguraron que este conflicto ya se prefiguraba a partir de la Convención Partidaria, en la que Arjol resultó seleccionado como el precandidato del radicalismo, por dos tercios de los convencionales. Por entonces, González –el otro candidato en esa convención– había cuestionado la selección y ahora ratificó que se presentará como precandidato, pese a no tener la venia de la cúpula partidaria.

Arjol y el aval partidario

Pero esta semana recrudeció la interna radical cuando los potenciales precandidatos salieron a hablar públicamente del tema. Este lunes, en el canal 8 MisionesCuatro, Arjol resaltó que “en convención partidaria, con más de 100 convencionales y por mayoría de dos tercios, se aprobó la lista a candidatos a diputados provinciales y se definió una estrategia electoral como partido político. Se definió cómo competir en este contexto y cuidar la banca nacional que tenemos”, dijo el concejal posadeño, quien añadió: “Se decidió competir con un solo candidato y ese fui yo”.

En cuanto a la disputa con González, dentro del frente Juntos por el Cambio, el edil opinó: “Podemos elegir por uno o por otro, pero las construcciones en la política son colectivas. No voy a perjudicar a mi espacio político por decisiones individuales”, lanzó en obvia referencia a la postura de González, que podría restarle votos a él en las PASO de Septiembre.

“Hay que pensar que de cada 2 argentinos 1 es pobre. Y los dirigentes hablan de los problemas de los dirigentes y no los de la gente. Más allá de la competencia y de los nombres que existan, el día después de las PASO tenemos que tener un compromiso de caballeros porque el desafío es enorme y al que le toque perder (acompañe al ganador)”, planteó Arjol, aferrándose a su precandidatura dentro del frente opositor.

Y luego aseguró que “me toca este desafío y no es una decisión mía, sino de una mayoría del partido, que con dos tercios es una mayoría especial”.

La respuesta de González

Ante estos planteos, González tomó el guante y este martes, le respondió sin mencionarlo, también en una entrevista televisiva en el mismo canal. “Ratifico mi candidatura a diputado nacional, estamos trabajando desde hace tiempo y reuniendo todos los requisitos para poder competir en las PASO. Esa decisión está firme y ratificada”, lanzó.

“Hubo una decisión de la conducción de la UCR que a mí y a muchos radicales nos generó preocupación. De operativizarse puede representar un impedimento para que candidatos radicales puedan competir en las PASO”, alertó el diputado provincial.

Acto seguido, le enrostró a la cúpula de la UCR Misiones, que “el espíritu de las primarias fue democratizar la elección de candidatos dentro de los partidos. Y que el radicalismo debe respetar esa ley nacional. Cualquier decisión partidaria que atente vulnere o ponga un obstáculo a la participación de candidatos, es ilegal, antidemocrática y no es oponible, porque no se va a poder concretar”, disparó.

Posible judicialización de la interna radical

“Espero que la conducción actual no insista en esta decisión, nosotros estamos en carrera y vamos a competir”, aseguró González, quien no descartó judicializar la interna.

González también disparó munición gruesa contra el actual presidente de la UCR Misiones, Ricardo Andersen, al recordarle que en 2019 la UCR también definió competir en las PASO dentro de JxC, con un solo candidato, es decir, el propio Andersen, “y salimos terceros. Que llevemos un solo candidato no garantiza que ganemos las PASO. Lo que garantiza que seamos competitivos es que haya candidatos preparados, decididos eso”, fustigó el legislador.

“El radicalismo debe honrar su historia y garantizar la participación de todos los que quieran ser candidatos”, bramó González, y recalcó que el conflicto podría terminar en Tribunales. “El camino legal está allanado. Y el primer paso es un pedido a la conducción partidaria para que no se ponga escollos a la participación. Ahora hay que formalizar el frente. Y si hubiera alguna limitación para la participación de candidatos (en las PASO) no habrá otra alternativa a que la justicia eche claridad”, amenazó.

Asimismo, González informó que los plazos legales ya están corriendo. Y que el 24 de julio deberían presentarse las precandidaturas.

Dos dirigentes que se quedarían sin cargos y las dietas legislativas

Fuentes de www.misionescuatro.com, revelaron que este conflicto que se encamina a la Justicia Electoral, ocurre en momentos en que referentes de Juntos por el Cambio, conversa sobre la confección de una lista de unidad. Ello para evitar el desgaste de unas internas. Y para preservar a la población de unos comicios que ocurrirán en plena segunda ola del coronavirus.

Tanto González como Arjol terminan sus mandatos y se quedarían sin cargo a partir de Diciembre. En consecuencia, de no competir y resultar electos en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias de Septiembre, y luego, en las generales de Noviembre, deberían volver a la actividad privada. Ambos son abogados. “Son las mezquindades personales que se ven en el armado de las listas”, confió una fuente al tanto de la vida interna del centenario partido.

Cabe recordar que en noviembre de 2019 (último dato disponible publicado en la página web de la Cámara baja), el sueldo de bolsillo (luego de pagar impuestos y demás descuentos) de un diputado nacional promedio fue de $161 mil. En adición, si vive a más de 100 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, percibió $33 mil por desarraigo. Y por movilidad entre $10 mil y $30 mil. La suma daría un total de entre $204 mil y $224 mil para los diputados.

Pero estos datos no incluyen el fenomenal incremento del 40% que el presidente de la Cámara Sergio Massa y su par en el Senado, Cristina Kirchner, acordaron para el sector legislativo. Según el portal Chequeado.com, actualmente, las dietas de los diputados nacionales alcanzan los 238.829 pesos.