El chofer de Baratta declara como testigo protegido

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Oscar Centeno cambió de estrategia procesal y aceptó la “delación premiada”, por lo que está aportando más datos a las pruebas recolectadas por el juez Claudio Bonadío en la Megacausa por coimas con la obra pública que involucra a Cristina Kirchner, Julio De Vido, Roberto Baratta y Oscar Thomas, junto a una docena de empresarios del más alto nivel.[/vc_column_text][vc_media_grid element_width=”6″ grid_id=”vc_gid:1533219369898-95b05cb8-8769-9″ include=”189922,165329″][vc_column_text]CAPITAL FEDERAL. Oscar Centeno, el chofer de Roberto Baratta, mano derecha del exministro Julio De Vido en el Ministerio de Planificación Federal, que anotó en ocho cuadernos el recorrido del pago de coimas durante el kirchnerismo, cambió su estrategia y decidió declarar como arrepentido ante la Justicia, según informaron fuentes judiciales a un conocido matutino nacional.

Centeno, el primer detenido por la megacausa de coimas que se inició a raíz de una investigación del diario La Nación, negoció los términos con el fiscal Carlos Stornelli en los tribunales de Comodoro Py. Con su nueva táctica, el autor de los apuntes sobre el pago de sobornos durante los gobiernos kirchneristas, busca los beneficios que da la figura del arrepentido.

Ayer Centeno cambió a su abogado, Norberto Frontini, para quedarse con una defensa oficial, una señal de que había optado por declarar como arrepentido.

También este miércoles, el fiscal Stornelli había adelantado a este medio que una posibilidad era ofrecerle a Centeno seguir en libertad a cambio de que acceda a convertirse en arrepentido.

El fiscal y Centeno negociaron sobre lo que está dispuesto a declarar. Tiene que ser información veraz, vinculada con el hecho investigado y tiene que apuntar a responsables de igual o mayor jerarquía que él (“para arriba”) o dar datos vinculados con la recuperación del dinero del presunto delito.

A cambio, el fiscal puede ofrecerle modificar su estado de detención durante el proceso y la pena puede bajar a la escala de la tentativa. Después, ese acuerdo se lleva al juez -en este caso, Bonadio- para que lo homologue.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][vc_column_text]