CAPITAL FEDERAL. El Gobierno negocia con Zulemita Menem para construir una estatua de su padre, el ex presidente Carlos Saúl Menem, para homenajearlo en vida. Quien conversa con la hija del senador, para concretar el homenaje es la secretaría general de la Presidencia, a cargo de Julio Vitobello, un hombre extrema confianza de Alberto Fernández.

“Cuando Menem pueda mejorar de su salud se va a poner su busto en Casa Rosada”, anticiparon a LPO cerca de Alberto Fernández.

Aunque, además, la iniciativa tiene el aval de la propia Cristina Kirchner. Es que, la ex presidenta siempre fue la menemista del matrimonio Kirchner. Néstor, en cambio, era más cercano a Eduardo Duhalde, que fue quien apoyó su candidatura presidencial en 2003.

La vicepresidenta le reconoce a Menem que siempre le ha votado bien en los temas importantes del Senado. Y con el paso de los años, lo definió como un “estadista”. Ello pese a la retórica de la militancia K, de supuesto rechazo a modelos neoliberales como el que encarnó el riojano en los años 90s.

En una sesión del Senado en 2018, Cristina dijo que la querían proscribir como a Lula en Brasil y defendió a Menem públicamente. “Esto que ocurre ahora nunca se vio. Mire, en los noventa yo fui una fuerte opositora al menemismo al punto que me echaron del bloque. Pero por favor, traigan de nuevo a ese estadista”, aseguró en un curioso homenaje al ex presidente.

Desde luego, los parangones entre Cristina y Menem, no son pocos. Ambos están denunciados y fueron procesados en múltiples causas por corrupción en el Estado. Y de hecho, en los 90s, fueron los Kirchner los que llevaron adelante el proceso de privatizaciones en Santa Cruz. Como ocurrió con el banco provincia de Santa Cruz.

En julio, Menem cumplió 90 años y sigue activo en el armado político de su espacio.