POSADAS. En poco más de un año del gobierno de Alberto Fernández, la Canasta Básica Total para un hogar tipo (dos adultos y dos menores) subió un 39,1% y pasó de $38.960,33 a 54.207,53. Mientras que la Canasta Básica Alimentaria, subió aún más, un 45,5%, pasando de $15.584,14 a $22.680,97.
Estos datos publicados por el INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos), sobre la variación del costo de vida, dejan muy expuesta a la gestión del presidente Alberto Fernández y su vice Cristina Kirchner.
Desde el oficialismo explican que el aumento exponencial en los precios de los alimentos y de los consumos básicos, obedecen a la crisis del coronavirus (Covid-19). Cabe aclarar que el costo de la CBA determina la línea de la indigencia, mientras que el de la CBT, el de la pobreza. Es decir, las familias que no alcancen a cubrir la CBA son indigentes y las que no cubran la CBT, son pobres.
¿Aumento de la pobreza, por la pandemia o por la economía?
Lo cierto es que, en el marco de la gestión de la pandemia llevada a cabo por el gobierno de Alberto y Cristina, los números son elocuentes. La variación interanual de la Canasta Alimentaria y de la Canasta Básica, en los distintos meses del 2020, no bajó del 39,6% (CBA en Septiembre) y del 35,7% (CBT en el mismo mes).
Pero, además, las máximas variaciones interanuales de la Canasta Básica y de la Canasta Alimentaria, se dieron antes de que la pandemia llegue al país. La mayor suba interanual de la CBT fue del 52,8% en Diciembre del 2019 (respecto de Diciembre del 2018). Y la mayor suba de la CBA fue del 55,8%, al comparar Enero del 2020 con Enero del 2019. Siempre según datos del INDEC.
Así pues, el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, hasta el momento no sólo no pudieron cumplir con la promesa de campaña, de “volver a traer el asado a la mesa de los argentinos”. De hecho, se incrementaron los índices de pobreza e indigencia en todo el país.