POSADAS. Para el analista Gustavo Córdoba, la designación de Sergio Massa como Ministro de Economía, Producción y Agricultura puede ser beneficiosa para el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, porque responde a la demanda de la sociedad de una “cambio de actitud” de la gestión y porque hay pocas expectativas en que “pueda lograr resultados económicos positivos”, con lo que cada logro que consiga el tigrense, se vería potenciado.

“Habrá que ver si este cambio de actitud es bien recibido por la sociedad argentina, que le reclamaba esto, un cambio de actitud y no un cambio de gabinete. Obviamente, un cambio de gabinete implica una posibilidad de reconfigurar la confianza y la posibilidad de encauzar la economía, y limitar la inflación”, consignó Córdoba, este jueves, en diálogo con el Noticiero de MisionesCuatro.

Para el consultor, “la enorme posibilidad que se le abre al gobierno es reconstruir parte de la confianza perdida por Alberto Fernández durante todo este tiempo”.

Ante la consulta de la comunicadora Mariela Martínez, Córdoba opinó que una de las razones de la llegada del diputado nacional al Gabinete, tiene que ver con el poder de lobby con el que cuenta, que “es comparable al de (la saliente ex ministra Silvina) Batakis”.

“A favor de Massa hay una muy baja expectativa de que el gobierno pueda lograr resultados económicos positivos”

De acuerdo con el analista, “hay cierta desprolijidad del gobierno desde la salida de (Martín) Guzmán (del Ministerio de Economía). Ojalá este cambio les permita ordenar esto, la política y la comunicación y cómo le explican a la sociedad las decisiones”.

“A favor de Massa hay una muy baja expectativa de que el gobierno pueda lograr resultados económicos positivos. Esto le brinda la posibilidad de dimensionar el doble si hacen las cosas bien”, acotó Córdoba, quien se pronunció a favor de una buena gestión, más allá de la cuestión electoral. “Pensar en los miles y miles de argentinos que cuando aumenta la inflación pasan a ser pobres, me genera un dolor muy profundo”, agregó.

“Ojalá tengamos un marco de razonabilidad y previsibilidad, que es lo que necesitamos para salir adelante”, insistió.

Reforzando la idea de las bajas expectativas, Córdoba remarcó que en las últimas mediciones de su consultora, “el gobierno de Fernández tiene una aprobación de apenas el 20%. Un 75% de los encuestados dicen que Fernández va en la dirección incorrecta. Lo poquito bueno que haga lo puede dimensionar de manera extraordinaria, en cambio a altas expectativas, la frustración está a la vuelta de la esquina”, subrayó.

El gobierno no ha ganado meses

Sin embargo, Córdoba fue muy cauto y mesurado, respecto de lo que puede obtener el oficialismo con la reconfiguración del gabinete. “No digo que el gobierno ha ganado meses. Ha ganado la posibilidad de trabajar día a día y regenerar la credibilidad perdida. Está muy bien que el gobierno resetee y trate de encaminar la cuestión inflacionaria, es lo más urgente”, enfatizó.

Y en esta línea, Córdoba insistió en que no existe país “que haya tenido altos niveles de inflación y haya podido salir sin diálogo institucional. Massa tiene un perfil y margen de maniobra, más allá de la mala imagen que tiene y comparte con el resto de los funcionarios, y tiene un su haber un nivel de negociación distinto del resto de la dirigencia política argentina”, destacó sobre el nuevo ministro.

“Las reacciones (del Mercado) no son negativas, hay un margen de maniobra importante, habrá que ver qué tipo de políticas van a implementar”, advirtió Córdoba, para quien, si el gobierno “no hacía esto iba a 2023 sin chances electorales”.

Finalmente, Córdoba evitó pronunciarse sobre si algún dirigente del Frente de Todos, capitaliza mejor esta reforma del Gabinete. “El Presidente ha quedado acotado en su poder relativo, Massa tiene la potencialidad de ser una figura central, habrá que ver si lo concreta o no”, concluyó.