BUENOS AIRES. Este jueves, la Corte Suprema de Justicia declaró inconstitucional la composición actual del Consejo de la Magistratura, que fue dispuesta por una reforma legal impulsada por Cristina Kirchner, como senadora nacional, en 2006.

Según La Nación, la Corte confirmó un fallo de cámara de 2016 que declaró que la integración actual del Consejo no respeta el “equilibrio” entre los estamentos que exige la Constitución Nacional y exhortó al Congreso para que “en un plazo razonable dicte una ley que organice el Consejo de la Magistratura de la Nación”.

Por el momento, el Consejo volverá a su vieja composición de 20 miembros, con el presidente de la Corte, Horacio Rosatti, como su titular. Actualmente, el órgano cuya función es controlar la labor de los jueces, está compuesto por 13 miembros.

Firmaron el fallo los cuatro jueces de la Corte: Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti. Aunque este último hizo una disidencia parcial. Sin embargo, coincidió con sus colegas en que la ley de 2006 es inconstitucional y en exhortar al Congreso a reformarla.

Un organismo clave para la Justicia y para el poder político de turno

El Consejo de la Magistratura es un organismo clave para la Justicia, porque es el que selecciona y controla a los jueces. Y lo que no es menos importante: administra los fondos del Poder Judicial.

En cuanto a los pasos concretos a seguir, la Corte sostiene que para volver a la vieja integración, el Consejo tiene “120 días corridos”. Mientras tanto, seguirá funcionando como hasta ahora. “Transcurrido dicho plazo sin que se haya completado la integración mencionada, los actos dictados por el Consejo de la Magistratura serán nulos”, aclaró el fallo de la Corte Suprema.

Para efectivizar la ampliación del Consejo, la Corte ordenó comunicar el fallo a las agrupaciones de jueces, abogados y académicos “a los efectos de que tomen la intervención que pudiera corresponderles para llevar adelante los procedimientos de selección de consejeros requeridos para completar la integración del Consejo de la Magistratura de la Nación”.

Los abogados deberán elegir a dos abogados más, lo mismo que el Congreso. En tanto, los jueces y las universidades deberán nombrar a un nuevo representante cada uno. Y se sumará al Consejo de la Magistratura, como presidente, Horacio Rosatti.

El presidente de la Corte no asumirá al frente de la Magistratura de inmediato

La Corte aclara en su fallo que “los nuevos miembros iniciarán su mandato de manera conjunta y simultánea”. Es decir, que Rosatti no presidirá de inmediato el nuevo Consejo. Sólo lo hará una vez que esté completa toda la nueva integración.

Pese a que declara inconstitucional la confirmación actual, la Corte advierte que “conservarán su validez los actos cumplidos por el Consejo de la Magistratura” hasta ahora.

En la Casa Rosada se presumía de antemano un fallo desfavorable. En tensión con la Corte, al Gobierno no le cae nada bien la idea de que el máximo tribunal ponga un pie en el Consejo y Rosatti se convierta en su presidente.

“El Gobierno envió la semana pasada al Congreso el proyecto para modificar la actual composición del Consejo de la Magistratura y esperamos que se debata. Creemos que eso es lo que hay que hacer en este momento, que es debatir ese proyecto”, dijo Gabriela Cerruti, portavoz de Alberto Fernández, este jueves.

La Corte decidió ir en contra de lo que había dictaminado, en mayo de 2018, la Procuración, a cargo de Eduardo Casal, que había recomendado no hacer lugar al planteo de inconstitucionalidad. Cabe recordar que este caso que esperaba una definición de la Corte desde hace más de cinco años.

Un revés inapelable a una reforma que impulsó Cristina Kirchner

Esta causa surge a raíz de una demanda que presentó el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires y obtuvo un fallo favorable de la Cámara en lo Contencioso Administrativo, el 19 de noviembre de 2015. Fue apelado por el gobierno kirchnerista (por eso no se ejecutó) y cuando asumió Mauricio Macri su gestión no desistió del recurso.

En 2006, a instancias de Cristina Kirchner, por entonces senadora, el Congreso redujo a 13 el número de miembros del Consejo de la Magistratura, con fundamento en que así sería “menos burocrático”.

Así,perdieron representantes los jueces, los abogados y la academia, y se eliminó el lugar de los partidos minoritarios (las segundas minorías del Congreso tenían un senador y un diputado en el Consejo). La reforma le dio además al oficialismo de turno poder de veto. Es que, ningún juez puede ser removido ni elegido sin el voto de al menos un oficialista.

El viejo Consejo de 20, al que se volverá ahora, estaba formado por cinco jueces (uno de ellos, el presidente de la Corte, que presidía también el Consejo), cuatro senadores, cuatro diputados, cuatro abogados, dos académicos y un representante del Poder Ejecutivo.