Este hecho tuvo lugar el 17 de octubre de 1945, en Buenos Aires y se lo considera como el nacimiento del peronismo. Históricamente, fue uno de los momentos más importantes del movimiento obrero argentino.

La movilización estuvo organizada por sectores considerados peronistas. Previamente, Perón había impulsado los derechos de los trabajadores desde la Secretaría de Trabajo y Previsión, organismo que fue creado a pedido suyo.

La figura de Perón en los sectores más populares iba en ascenso y los celos de los militares aumentaban. A principios de octubre, el ministro de Guerra, el general Eduardo Avalos, cabeza de los sectores conservadores del Ejército, plantea la detención de Perón, la entrega del Ejecutivo a la Corte Suprema y la convocatoria a elecciones.

Presionado por esos sectores, el presidente Edelmiro Farrell ordena el 12 de octubre de 1945 la detención de Perón y su traslado a la isla Martín García.

Tres días después, el gremio azucarero de FOTIA se declara en huelga para pedir su liberación, y un día después, los obreros de la carne de Berisso y Ensenada se adhieren de forma masiva a la protesta.

Las manifestaciones se multiplicaron en fábricas y talleres de Avellaneda, Lanús, Valentín Alsina y los barrios obreros de Rosario.

Los hechos se precipitan: Perón acusa un malestar y es trasladado al Hospital Militar en el barrio de Belgrano, donde arriba el 17 por la madrugada.

La multitud era imparable y, en las primeras horas de la tarde, colmó por completo la Plaza de Mayo, donde los manifestantes se refrescaron los pies en la fuente para mitigar el efecto del calor.

Pasadas las 23, desde el balcón de la Casa Rosada, Juan Perón les habló a los 300 mil trabajadores congregados en la plaza, en un hecho que da inicio a su movimiento político.

Un año después de aquel 17 de octubre de 1945, Perón fue elegido Presidente de la Nación.

El Partido Justicialista nombró la fecha como “Día de la Lealtad”, también llamado “Día de la Lealtad Peronista” o “17 de Octubre”.