BUENOS AIRES. La diputada nacional Graciela Ocaña (JxC – Coalición Cívica) presentó una denuncia ante el fiscal federal Eduardo Taiano para que investigue si hubo un posible “vacunatorio VIP en El Calafate”. Y si se desvió vacunas Sputnik V, “que debían ir al personal de salud”.
Así, el expediente que concentra todas las denuncias por los circuitos irregulares a través de los cuales se habrían favorecidos a dirigentes, políticos, sindicalistas y familiares con la aplicación de la vacuna Sputnik V, sumó otra denuncia. Y sumó otra línea de investigación en la causa a cargo del fiscal Taiano.
Según publicó Clarín este lunes, el escrito con la nueva información fue presentado el viernes pasado en los Tribunales de Comodoro Py. A raíz de eso, la justicia comenzó a investigar un presunto desvío de vacunas en la provincia de Santa Cruz, enmarcado en el expediente que lleva adelante la jueza María Eugenia Capuchetti.
Esta magistrada está a cargo del expediente que reúne todas las denuncias que se fueron presentando los últimos meses, por el montaje de posibles vacunatorios VIP.
Lo que denuncia Ocaña y la maniobra investigada
Ocaña plantea en la denuncia judicial, que se podrían haber cometido delitos de acción pública “por parte de funcionarios del Ministerio de Salud de la Nación”. En consecuencia, solicitó que se investigue el vuelo que trasladó 60 dosis de la vacuna Sputnik V a la provincia gobernada por Alicia Kirchner. Más específicamente, Ocaña pidió que se analice un vuelo que llegó a El Calafate.
Según lo que se conoció del vuelo comercial de Aerolíneas Argentinas que está bajo la lupa de la justicia, partió el viernes 23 de enero a las 8.40 desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza con destino al Aeropuerto Internacional de El Calafate.
Sin embargo, “a último momento, la Policía de Seguridad Aeroportuaria habría recibido un llamado de una autoridad de Aerolíneas Argentinas solicitando que no despegue el avión. Ya que se dirigiría una persona enviada por la entonces Secretaria de Acceso a la Salud, Dra. Carla Vizzotti, con -en principio- unas 60 dosis de la vacuna Sputnik V”, reveló Graciela Ocaña a Clarín. Dicha persona sería Gustavo Javier Bahut, jefe de monitoreo del Hospital Nacional Posadas.
Qué investiga la justicia federal
En la denuncia consta que este retraso se habría justificado, “para no levantar sospechas”, señalando que “la conservadora donde se guardaron las dosis de la vacuna, debía pasar por el escáner destinado al control de la tripulación”.
El relato de los hechos, ahora bajo investigación judicial, sostiene que agentes de la Policía de Seguridad Aeroportuaria “habrían introducido por el escáner las vacunas y la conservadora se la habrían dado en mano al comandante de la aeronave de apellido Dono para su transporte”.
Ante esta situación, Ocaña solicitó judicialmente, el viernes pasado, que se investigue a fondo lo sucedido.
Ahora, Ocaña pidió verificar los registros de las cámaras de seguridad de los aeropuertos internacionales de Ezeiza y el Calafate. Con el fin de examinar la maniobra. Y también solicitó a la justicia federal que convoque a declarar a Gustavo Javier Bahut.
Asimismo, en el escrito se sugirió un pedido de informes a Aerolíneas Argentinas, “a fin de verificar la composición de la tripulación del vuelo indicado. E indique quien habría impartido la orden de demorar el despegue del avión”, afirman.
En diálogo con Clarín, Ocaña explicó que presentó la denuncia “porque queremos que se investigue si en El Calafate funcionó un vacunatorio VIP. Y si esas 60 dosis que debían destinarse para personal de salud, fueron derivadas para otros fines”, recalcó.
