El horario de inicio de la presentación final se fijó a las 17:30 hs. Pero horas antes, los protagonistas fueron copando los alrededores, acarreando las chanchas, estructuras y demás elementos que utilizaron en sus presentaciones. Con el Anfiteatro colmado por el público y la caída del sol como testigo, el espectáculo comenzó. Descendían por las escaleras rumbo al escenario con sus trajes y alpargatas bordadas, rostros y cabellos pintados; plumas y mucho brillo, así desplegaron todo su poderío artístico para el disfrute de los presentes.
Para los jóvenes, el Show de Scolas se trata de la más especial de las noches. En esta actuación desplegaron todo lo que ensayaron durante meses, armando una puesta en escena e ideando el mejor de los espectáculos para dejar a todos los espectadores sorprendidos.
Ritmo, alegría y diversión, la jornada se desarrolló con normalidad y sin inconvenientes. La misma se extendió hasta alrededor las 05:30 hs. Chicos felices y ansiosos, otros nostálgicos, porque fueron quienes tuvieron su última participación en este tradicional evento. Entre lágrimas y abrazos con sus pares, cerraron un ciclo de dedicación, creatividad y esfuerzo.
Cabe resaltar que esta edición de la Estudiantina sumó más colegios a su grilla, donde participaron 25 instituciones, congregando más de 4.200 chicos, distribuidos en los cuerpos de baile, bandas de música y asesores de carroza. Pero no eran solo ellos en cada velada, detrás tenían todo el respaldo y acompañamiento de sus familiares, amigos y de las instituciones educativas. Fue una verdadera fiesta, marcada por la impronta juvenil, resaltado el compañerismo, talento e ingenio de los estudiantes.
Así, la mítica y legendaria Estudiantina posadeña cerró una página más de su historia. Solo resta esperar las conclusiones del jurado y premiar a los colegios ganadores.