POSADAS. Avanzan los trabajos de refacción y saneamiento de la Escuela Provincial de Enseñanza Técnica Nº 1 “Unesco” y las autoridades provinciales cumplieron parcialmente con los puntos acordados con los estudiantes y la comunidad educativa, que llevaron adelante una sentada y protesta pública que motivó a los funcionarios a “bajar” al lugar y tomar cartas en el asunto.

Según Mariana Lewtak, una de las integrantes de la asociación de padres autoconvocados de la EPET 1, el conflicto se desató “por la aflicción de los chicos” a raíz de “las altas temperaturas y los golpes de calor” en un establecimiento en el que no había equipos de aire acondicionado.

“Nos preocupamos y no ocupamos. El 24 de marzo nos reunimos y conformamos un grupo para poder hablar con el director, y el 27 nos presentamos y tomamos conocimiento de los chicos que hacían la sentada. A partir de ahí, presentamos una nota con 16 puntos de reclamo, de los cuales, aproximadamente la mitad se están cumpliendo”, contó Lewtak al Móvil de MisionesCuatro este lunes.

En esta línea, la madre de uno de los estudiantes de la EPET 1, aclaró que “estamos esperando que se cumplan la otra parte”, de lo solicitado.

“Se recibieron los aires acondicionados”, dijo Lewtak, y añadió que “se está trabajando en la parte eléctrica” del histórico establecimiento educativo.

“La parte de la conectividad está sin resolver, esperamos a la gente de Marandú que son los encargados de ver la conexión”

En este punto, Lewtak destacó “la colaboración de los chicos”, que es “impecable” en los trabajos de pintura y saneamiento del inmueble ubicado en la avenida Lavalle 1945. “Y tenemos colaboración de los padres: hemos recibido donaciones (en alimentos) y hay un grupo de madres trabajando en la parte de la comida. A los chicos se les da un refrigerio a media mañana y también a la tarde”, reveló.

Respecto de los puntos del reclamo que falta resolver, Lewtak mencionó la conectividad, los ordenadores nuevos y los bebederos. “La parte de la conectividad está sin resolver, esperamos a la gente de Marandú que son los encargados de ver la conexión. Y prometieron computadoras nuevas. Los bebederos están, pero se tienen que instalar”, comentó la mujer.

“Esta asociación convoca a todos los papás para que se involucren y colaboren. Nuestra escuela va a cumplir 100 años el año que viene y lo que hemos logrado en 7 días es inolvidable”, remató Lewtak.