[vc_row][vc_column][vc_column_text]Mientras que los comerciantes del sector señalan que la prohibición fomentará el comercio clandestino y la circulación de explosivos no regulados y potencialmente peligrosos, las asociaciones proteccionistas se mantienen firmes en la prohibición que según resaltaron, es un reclamo también de ex combatientes y personas con Trastornos del Espectro Autista y con ataques de pánico (ansiedad), que su sufren por la explosiones.[/vc_column_text][vc_column_text]POSADAS. Siguen las discusiones en el Concejo Deliberante de Posadas por la llamada ordenanza de Pirotecnia Cero, donde no llegaron a un acuerdo el sector de los comerciantes que venden artículos pirotécnicos y las asociaciones proteccionistas que se mantienen firmes en su intento de prohibición. Los comerciantes sostienen que una prohibición como la que se plantea fomentará el comercio ilegal y la pirotecnia clandestina, lo que entraña un mayor peligro para las personas que usen los artefactos que no están regulados. Por su parte, los proteccionistas insisten en que el reclamo contra la pirotecnia no es exclusivo de las organizaciones que defienden los derechos de los animales, sino que también lo impulsan asociaciones de ex combatientes y de personas que sufren de Trastornos del Espectro Autista (TEA).
MisionesCuatro habló con Santiago Roelburg y Vanesa Florentín, representantes de los comerciantes y de las asociaciones proteccionistas, respectivamente, quienes confluyeron en una mesa de diálogo conformada en el Concejo Deliberante posadeño, quienes no llegaron a un acuerdo.
Roelburg insistió en que “ambas partes apuntamos a disminuir el nivel sonoro e incrementar los espectáculos lumínicos. Pero nosotros apuntamos a la seguridad de la ciudadanía. Prohibir una venta que está regulada y controlada a nivel nacional, sólo va a incrementar la clandestinidad”, enfatizó el comerciante.
“Llegar a un buen acuerdo permitirá regular los productos que se van a vender. Por eso presentamos un proyecto de ordenanza para la regulación y no a la prohibición”, explicó el comerciante que propuso limitar la venta de artefactos, señalando como tope, las bombas de dos pulgadas, “que es la más chica que hay en el mercado y puede ser de venta libre”.
Roelburg advirtió que una prohibición total atentaría contra los puestos de trabajo de las personas empleadas en el rubro de la pirotecnia.
Por su parte, la representante de las asociaciones proteccionistas insistió en que no se pretende la eliminación de los estruendos sólo en función de los derechos de las mascotas domésticas, sino que se trata de un reclamo de ex combatientes, familias con personas con TEA y personas con ansiedad o ataques de pánico (con diagnóstico psiquiátrico). “Es una gran parte de la sociedad la que se ve afectada por la pirotecnia. Al iniciar la campaña por los animales, nos dimos cuenta que hay una gran población afectada. Nosotros queremos cero estruendo y ellos quieren bajar los decibles, como para que eso no afecte a animales o personas”, explicó.
“Es medio difícil controlar esto. Tenés que tener un aparato para medir decibles y no hay una infraestructura para (implementar) esto”, señaló Florentín.
Otra de las referentes de los proteccionistas sostuvo que están a favor de una consulta popular y de un involucramiento de la sociedad sobre este tema. De hecho, Florentín reveló que en cuatro días lograron reunir 3 mil firmas contra la polución sónica, lo que resulta destacable porque sólo se trató de un muestreo informal y no de una campaña propiamente dicha.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][/vc_column][/vc_row]
