Las reservas generaron grandes expectativas en el sector y, en ese sentido, el movimiento turístico fue considerable. El saldo final ha resultado muy satisfactorio. Las cifras demostraron que la ocupación hotelera alcanzó un 90%, con más de 3.200 visitantes que disfrutaron de estadías que, en su mayoría, promediaron las 2,5 noches. Esto resultó en más de 9.000 pernoctaciones registradas.
En términos de gastos, cada jornada promedió los $73,000. Estos números son de gran importancia, ya que ejercen un impacto significativo en el crecimiento de la economía local. En conjunto, las ganancias superaron los $221 millones de pesos, una cantidad que refleja el impacto económico que se distribuyó en todas las facetas de la actividad turística. Esta distribución de recursos tuvo un impacto particular en los proveedores y empresas vinculadas, tanto directa como indirectamente, con el sector turístico.
El buen clima acompañó el desarrollo de todas las actividades
Posadas se destaca por su atractiva combinación de belleza natural y opciones culturales, las cuales transforman a la ciudad en un escenario tentador. Los espacios verdes, como el Parque de la Ciudad y el Jardín Botánico, atrajeron la atención de una amplia audiencia.
A lo largo de la Costanera se congregaron tanto turistas como lugareños para disfrutar del cálido sol invernal. El municipio, plenamente consciente de la importancia del turismo, organizó diversas actividades para incentivar la exploración de la ciudad y sus rincones. Un elemento clave en esta iniciativa fue el recorrido a bordo del city tour “La Jangada”, una experiencia que, como siempre, invita a descubrir los lugares más recónditos.
Además, los recorridos por el emblemático Jardín Botánico resultaron sumamente populares, sin dejar de mencionar el paseo por la histórica Bajada Vieja y la visita al monumento Andresito, los cuales también atrajeron gran interés gracias a las diferentes expresiones artísticas que el público presente tuvo el privilegio de apreciar en la travesía.
En el ámbito gastronómico y comercial, se ha observado un funcionamiento ejemplar, en el marco del mes de las infancias. Bares y restaurantes gozaron de actividades a pleno, mientras que la afluencia de visitantes se tradujo en ventajas tangibles para los proveedores de servicios, incluyendo hoteles y agencias de viajes, así como el variado conjunto de negocios locales que directamente se benefician de esta creciente demanda.
El flujo constante de visitantes y los números finales indican de manera clara que el potencial turístico de la ciudad se encuentra en uno de sus momentos más destacados. Una vez más, Posadas se encuentra en el centro de la atención en la región, consolidándose como un destino preferente y sumamente atractivo.