POSADAS. El desborde del arroyo San Lucas que atraviesa el barrio San Onofre II está causando estragos en la zona, cada vez que llueve, según denunciaron los vecinos del lugar, que además, padecen por el pésimo estado de las calles y por la escasa iluminación. Según confiaron a MisionesCuatro, son unas 200 las familias afectadas por las inundaciones y las calles muchas veces intransitables. Pero, además, el municipio y Vialidad ya cuentan con un proyecto de urbanización que está paralizado desde hace 7 años.

En diálogo con MisionesCuatro, Ana Peralta, una de las residentes de San Onofre II, comentó: “Es el mismo problema de siempre, que venimos reclamando día tras día, por nota y personalmente. De allá arriba viene el agua y arrastra todo, piedras y basura. Prácticamente es un arroyo, (el arroyo) Nicolás Avellaneda”, se quejó.

“Y el colectivo hace malabares para pasar. Tampoco queremos quedar sin colectivos, porque hay chicos que van a la escuela”, añadió la mujer.

Asimismo, el puente en el barrio “trae basura de todos lados, se inunda y a los vecinos les entra agua. Parece un riachuelo. Queda con basura, palos y perros muertos”, denunció.

Peralta insistió en que las obras de asfaltado no llegaron a la zona, porque culminaron en la zona de “Las Américas. Nosotros quedamos en el olvido y a las familias les entra agua”, dijo.

Por otra parte, la vecina contó que en el lugar reclaman la apertura de la calle Humahuaca, para que las personas que residen allí “puedan tener luz y agua. Tienen cables que pasan por sobre las casas. Hace calor y Dios quiera nunca pase que se derritan los cables. Porque sería una tragedia para grandes y chicos”, advirtió.

A su tiempo, Raúl Rodríguez, otro vecino que llegó a presidir la comisión vecinal de San Onofre II, explicó que “no es la primera vez” que sufren por el desborde del arroyo San Lucas. “Se gestionaron cosas pero lamentablemente, con el arroyo, la gente sufre. Allá abajo hay un puentecito de madera por el que pasan los chicos y es un peligro”, sostuvo.

En cuanto al asfaltado de la calle Avellaneda, Rodríguez puso de relieve que, al culminar las obras hasta la avenida Las Américas, “el agua viene para acá abajo, donde también existe San Onofre. Viene un río. El día que llueve no podés llamar a la policía, a la ambulancia ni nada”, reveló.

Por otra parte, Rodríguez confió que ya hay un proyecto de urbanización y saneamiento listo desde 2015. “Vinieron personal de la Dirección de Vialidad a mostrarnos un croquis de un futuro puente. No sé cuándo será. En 2015, con el ingeniero de Vialidad recorrí de punta a punta el arroyo. Y me dijeron ‘falta la empresa nada más’. Estamos en 2022 y nunca llegó la empresa. Estamos en esa”, describió.

Según su estimación, unas 200 familias se ven afectadas por el desborde del San Lucas, y por el mal estado de las calles, las calles sin apertura y el abandono en general del barrio.