El asentamiento Sol de Misiones enfrenta desafíos significativos debido a la precariedad de las viviendas, que están construidas con chapas de zinc oxidadas y vulnerables a daños causados por el granizo y las inclemencias del tiempo. Además, la comunidad está compuesta por familias numerosas, lo que aumenta las dificultades en momentos de crisis.
Carmen subrayó la importancia de la reubicación y señaló que, aunque los papeles y el censo de la comunidad están en orden, dependen de la promesa de la municipalidad para obtener un lugar adecuado para vivir con dignidad. La seguridad y el bienestar de los residentes son las principales preocupaciones, y esperan que las autoridades cumplan con su compromiso de reubicar a las familias en un entorno más seguro.
La residente del asentamiento Sol de Misiones agradeció la promesa de reubicación por parte de las autoridades municipales y expresó su esperanza de que esta promesa se materialice en acciones concretas para mejorar la calidad de vida de la comunidad.