La asamblea comenzó con un análisis exhaustivo de la situación, incluida una reunión reciente con la presidente del Consejo General de Educación (CGE). Se discutieron una serie de problemas que afectan tanto a docentes como a estudiantes y profesores universitarios, entre ellos los bajos salarios, la falta de insumos en las escuelas, y casos de corrupción y nepotismo en el CGE.

Entre los reclamos expresados se destacan la necesidad de mejoras salariales, el fin de la corrupción y el nepotismo en el CGE, y una atención urgente a la situación de los comedores escolares y la infraestructura educativa. Además, se hizo hincapié en la preocupación por la carga virtual de la asistencia y la información administrativa, así como por la falta de actualización de haberes para los jubilados.

La asamblea del FTEL resolvió declarar la emergencia de la educación pública en todos los niveles y modalidades del sistema educativo provincial, y llamó a la docencia y a los trabajadores de la educación en general a resistir frente al ajuste participando activamente en la jornada de lucha del 23 de abril y en jornadas subsiguientes.

Entre las demandas específicas se encuentra la derogación de una resolución del CGE que ataca la escuela pública, así como la exigencia de una explicación sobre la supuesta devolución al Estado de fondos percibidos indebidamente por un exfuncionario. También, se convocó a un paro de 24 horas el 2 de mayo, con concentración frente a Casa de Gobierno.