“Fue un momento feo”, compartió, describiendo el ambiente tenso y desagradable que se vivió durante los incidentes. Lamentó que, a pesar de llevar adelante un reclamo justo, los trabajadores sean recibidos con indiferencia y agresiones por parte de las autoridades.

“Estamos protestando y llevando adelante un reclamo justo”, afirmó, destacando la legitimidad de las demandas de los trabajadores. Sin embargo, expresó su profundo dolor ante la falta de respuesta adecuada por parte del Gobierno provincial y la violencia ejercida hacia los manifestantes.

“Nos duele la actitud”, agregó, subrayando el impacto emocional de la situación en la comunidad educativa y en los trabajadores en general. Sus palabras reflejan la indignación y la frustración de muchos frente a la falta de diálogo y respeto hacia los derechos de los trabajadores.